Neuquén y Río Negro pagan la factura eléctrica más cara del país

sao




Este mes se encuentra vigente la Resolución 7/24 de la Secretaría de Energía que fija los precios estacionales de la energía eléctrica para el periodo febrero-abril de 2024 en todo el país.

Según el último informe elaborado por el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la Universidad Nacional de Buenos Aires (UBA) y del CONICET, Neuquén y Río Negro tienen la tarifa eléctrica más alta del país.
El estudio comparativo dividió a los usuarios del servicio de energía eléctrica en tres categorías según su nivel de ingresos: altos ingresos (N1), ingresos medios (N3) e ingresos bajos (N2). La factura eléctrica promedio a nivel nacional es de $42.877 para un hogar de altos ingresos, $17.453 para un hogar de ingresos bajos y $18.048 para un hogar de ingresos medios.
“La comparación de los cuadros tarifarios entre jurisdicciones indica que, ante igual consumo, las facturas finales más bajas se encuentran en La Rioja, Tierra del Fuego y el AMBA para los N1. Mientras que para los N2 y N3, La Rioja y el AMBA presentan las facturas más baratas del país. Por otra parte, las facturas más altas se observan en Neuquén, Río Negro y Mendoza para los N1, mientras que los usuarios N2 y N3 pagan las facturas más altas en Mendoza, Río Negro y Santa Fe”, señala el reporte.
¿Por qué varían tanto las facturas?
De acuerdo al informe, “la dispersión de tarifas es multicausal. Es un proceso complejo de identificación de costos que reflejan las características propias de la red y de la región en donde se presta el servicio. A su vez, responde no solo a diferentes estructuras tarifarias y a características estructurales propias del servicio público de distribución, sino también a factores exógenos como la existencia de diferentes cargas impositivas y anomalías como la ‘captura regulatoria’ que altera artificialmente los niveles tarifarios en algunas jurisdicciones”.
Por lo tanto, la comparación de tarifas puede mostrar una foto del estado de situación en un momento determinado, pero se deben contemplar otros factores que inciden en la determinación de tarifas en cada jurisdicción. En el sector de distribución conviven empresas públicas (provinciales), empresas privadas y cooperativas, alcanzadas por marcos regulatorios nacionales, como en el caso de EDENOR y EDESUR, provinciales y municipales en el caso de cooperativas.
Desglose de la factura
Para un usuario N1 (altos ingresos, sin subsidios), el 31% de la factura promedio se explica por el costo de la energía consumida, mientras que el 43% corresponde al cargo por distribución y el 26% restante a impuestos. En el caso de un usuario N2 (ingresos bajos), solo el 5% de la factura corresponde al costo de la energía, mientras que el 66% se destina al cargo por distribución y el 29% a impuestos. Por último, un usuario N3 (ingresos medios) paga por energía el 6% de la factura, con un 65% correspondiente al cargo por distribución y el 29% restante a impuestos.
En los tres segmentos se observa que en las jurisdicciones con las tarifas más altas, la factura presenta una mayor incidencia de los cargos de distribución respecto a los componentes de energía e impuestos. Por el contrario, en las jurisdicciones con tarifas más bajas, es el costo energético el que ocupa una proporción mayor de la factura final en comparación con los otros dos componentes.

QUÉ TE GENERA ESTA NOTICIA



Artículo anteriorVuelve a rodar «Río Negro es una provincia que creció con el avance del Tren Patagónico»
Artículo siguienteGustavo Garibaldi: «El pádel es un deporte para todas las edades»