La minería en la provincia de Río Negro se ha consolidado como un motor económico clave en los últimos años.
A través de un enfoque tecnológico avanzado y una gestión prudente de los recursos naturales, se ha logrado transformar el paisaje económico de la región sur de la provincia. Aunque los tiempos de la minería difieren considerablemente de los de los hidrocarburos, la paciencia y la inversión a largo plazo han permitido que proyectos mineros estratégicos comiencen a mostrar su impacto en las economías locales. En este contexto, la tecnología y la innovación han jugado un rol determinante, especialmente en la gestión del consumo de agua, un recurso crítico en cualquier operación extractiva.
Tecnología y consumo de agua: un cambio clave
Uno de los puntos más destacados en la evolución de la minería en Río Negro ha sido la optimización en el uso del agua, un recurso vital para las actividades mineras. El Secretario de Minería de la provincia, Joaquín Aberastaín Oro, explicó en una entrevista reciente que, gracias a los avances tecnológicos, el consumo de agua en uno de los proyectos más importantes, Calcatreu, será hasta un 80% menor de lo que se había proyectado hace casi dos décadas. Esto se debe al uso del método de lixiviación en pilas, un circuito cerrado que permite recuperar y reutilizar el agua, reduciendo significativamente su impacto en el acuífero de la zona.
Aberastaín Oro destacó que «se proyecta consumir solo el 30% de la recarga del acuífero», lo que no solo garantiza la estabilidad de este recurso, sino que también asegura su recarga anual. Además, el sistema cumple con todos los estándares de control ambiental, lo que refuerza el compromiso del gobierno y las empresas con el desarrollo sostenible de la minería en la región.
Los 33 proyectos activos: dinamismo económico en la región sur
Actualmente, existen 33 proyectos mineros activos en distintas etapas de desarrollo en la provincia de Río Negro. Estos proyectos abarcan una amplia gama de minerales, incluidos el oro, la plata, el uranio, el vanadio y el litio, lo que genera un movimiento económico importante en las localidades del sur provincial. El Secretario subrayó que «prácticamente todos los proyectos están en la línea sur», una región que ha experimentado un impulso económico gracias a la inversión en minería.
Entre los proyectos más avanzados se encuentra el reservoriode uranio «Amarillo Grande», ubicado en la zona de Valcheta. Este proyecto tiene implicaciones importantes no solo para la minería, sino también para otras actividades industriales. Por ejemplo, el proceso de separación del uranio utiliza carbonato de sodio, un insumo que se produce en la planta ALPAT de San Antonio Oeste, lo que refuerza la cadena de valor provincial.
La energía nuclear como solución limpia
El interés en el uranio ha crecido considerablemente a medida que el mundo revisa su enfoque hacia la energía nuclear. En la COP28, celebrada el año pasado, 20 países se comprometieron a triplicar la capacidad mundial de generación de energía nuclear para 2050, reconociendo su papel clave en la reducción de emisiones de CO2. Según Aberastaín Oro, «la energía nuclear es la más limpia que existe», y Río Negro está bien posicionada para aprovechar este resurgimiento en la demanda de uranio.
El secretario destacó que, en comparación con otras provincias mineras, Río Negro tiene una ventaja competitiva significativa en términos de conocimiento y tecnología nuclear. La provincia cuenta con instituciones como el Instituto Balseiro y empresas tecnológicas como INVAP, además de la planta enriquecedora de uranio en Pilcaniyeu. Todo esto proporciona a la provincia una base sólida para desarrollar proyectos nucleares de manera segura y eficiente.
El papel del litio en la transición energética
Otro mineral que ha despertado un gran interés en la provincia es el litio, un recurso esencial para la transición energética global. Aunque los precios del litio han bajado recientemente, su uso en baterías y tecnologías de descarbonización sigue siendo fundamental. Río Negro cuenta con yacimientos de litio en pegmatitas, similares a los de Australia, el principal productor mundial de este mineral. Aunque los proyectos de litio en la provincia están en una etapa temprana de exploración, las perspectivas a largo plazo son prometedoras.
Aberastaín Oro explicó que el litio de Río Negro tiene características muy similares al de Australia, lo que sugiere un futuro interesante para estos yacimientos. Además, el hecho de que las empresas mineras que actualmente están explorando en la provincia ya tienen un horizonte más claro gracias a la puesta en marcha del proyecto Calcatreu, abre la puerta a mayores inversiones en este sector estratégico.
El proyecto Calcatreu: un catalizador para nuevas inversiones
La puesta en marcha del proyecto Calcatreu ha sido un hito clave para la minería en Río Negro. Según Aberastaín Oro, todas las empresas que hoy están explorando en la provincia estaban esperando que este proyecto comenzara para poder planificar nuevas inversiones. La decisión del gobierno de avanzar con Calcatreu ha proporcionado la seguridad política que el sector empresarial necesitaba para comprometerse con proyectos a largo plazo.
La tecnología también ha jugado un papel crucial en la viabilidad de Calcatreu. La reducción del consumo de agua, combinada con métodos de extracción más eficientes y sostenibles, ha transformado un proyecto que llevaba más de 20 años en desarrollo en una realidad concreta que está impulsando la economía local.
El desafío de la percepción pública sobre el uranio
A pesar de los avances tecnológicos y las garantías de seguridad, el uranio sigue siendo un tema delicado para muchas comunidades. Los recuerdos de desastres nucleares pasados, como el accidente de Fukushima o las bombas atómicas de la Segunda Guerra Mundial, han generado temores en torno a este mineral. Sin embargo, Aberastaín Oro subrayó que «la producción de uranio hoy en día es prácticamente una cantera», sin riesgos significativos de radiación. Además, el uso de carbonato de sodio en el proceso de separación del uranio refuerza la seguridad de las operaciones.
El secretario reconoció que «estamos ante la necesidad de un trabajo de percepción, más que de mejoras en la tecnología», y destacó la importancia de involucrar a la ciudadanía en los procesos de evaluación ambiental y las audiencias públicas para generar confianza en los proyectos mineros.
Conclusión
La minería en Río Negro está en un punto de inflexión, impulsada por la tecnología, la inversión y el compromiso con un desarrollo sostenible. Con 33 proyectos activos y un enfoque en minerales clave para la transición energética, la provincia está bien posicionada para convertirse en un actor importante en el escenario minero global. La paciencia, la innovación y la gestión responsable de los recursos naturales serán esenciales para asegurar que este crecimiento sea sostenible a largo plazo.
