Los radares en Río Negro volverán a funcionar a partir de noviembre, luego de un período de suspensión y readecuación. Actualmente, están inhabilitados en diversas rutas nacionales y provinciales debido a la aprobación de la ley 5726, que regula el funcionamiento de los cinemómetros controladores de velocidad en todos los caminos y rutas de la provincia.
Javier Acevedo, presidente del bloque de la Coalición Cívica ARI, confirmó que la reactivación de los radares se llevará a cabo por disposición provincial. «Así me lo manifestó el ministro de Seguridad, Daniel Jara. Están ultimando los detalles de la reglamentación que está finalizando en los ámbitos legal y técnico, además de la fiscalía de Estado. A mediados de noviembre debería estar lista toda la reglamentación, y todos los radares con la cartelería correspondiente y todos los requisitos necesarios para que un radar vuelva a funcionar y cuente, por supuesto, con la reglamentación legal», afirmó Acevedo.
La norma aprobada en julio establece la obligatoriedad de una adecuada señalización que informe a los conductores sobre la proximidad de radares y las velocidades máximas permitidas. El legislador del ARI recordó que la ley exige la cartelería para que «el conductor tenga información fehaciente de que se aproxima un radar, así como las velocidades máximas permitidas para transitar por esos lugares».
La ley estipula que debe haber señalización a 900 metros antes de los cinemómetros, así como la indicación de la autoridad de aplicación, que en este caso será la Agencia Provincial de Seguridad Vial.
El legislador también resaltó la importancia de una señalización adecuada, que incluya «diferentes carteles de reducción de velocidad, lo que implica colocar entre seis y siete carteles a distintas distancias hasta que te aproximas al radar». Además, es obligatoria la colocación de conos fijos cada cien metros.
Acevedo advirtió sobre la falta de información en algunos lugares. «Hay radares que no tienen nada, no hay indicación de velocidades máximas, hay toda una falta de información, y lo que tiene que hacer después la agencia provincial es mantener, cada seis meses o antes, el control de que toda la cartelería no sea vandalizada, retirada ni dañada. Si no, el conductor se puede encontrar con el radar sin darse cuenta de que debe reducir la velocidad».
Qué pasa con los radares en los municipios
En cuanto a la instalación de radares en los municipios, la ley establece que las autoridades provinciales son las que regulan su colocación en rutas nacionales y provinciales. Los municipios tienen la facultad de instalar radares dentro de su ejido urbano, siempre que no se ubiquen en una ruta provincial o nacional.
Acevedo remarcó que «los municipios andinos, como Dina Huapi, Bariloche y El Bolsón, han estado engañando a la gente. Muchas veces creen que son autónomos y que no están sujetos a las leyes provinciales, pero no es así».
«El ministro de Seguridad me aseguró que los radares habilitados por la Agencia Nacional de Seguridad Vial para algunos municipios, así como los habilitados por la Agencia Provincial, que se dividen en dos bloques de radares, quedarán todos bajo la órbita de la Agencia Provincial de Seguridad Vial a partir de esta ley. Esta reglamentación los encuadra a todos, y si alguna localidad desea habilitar un radar, deberá solicitarlo expresamente a la Agencia».
Acevedo también se refirió a los radares en Valle Medio que no han sido habilitados: «Si siguen multando o emitiendo alguna multa, no la paguen porque está fuera de la ley».