El emprendimiento olivícola Familia Kanje, de San Antonio Oeste, alcanzó un hito histórico al recibir la distinción Gran Prestigio Oro en un concurso internacional considerado el más importante de Latinoamérica y uno de los cinco más destacados del mundo.
El productor Matías Kanje expresó su orgullo por el reconocimiento: “Nos dieron la distinción Gran Prestigio Oro. Es un concurso internacional, el más grande de Latinoamérica y top 5 a nivel mundial, con 195 empresas de todos los continentes. Obtuvimos 97 puntos sobre 100 y además nos premiaron como el mejor aceite argentino del certamen, ubicándonos en el top 20 general, siendo los únicos representantes del país en ese grupo”.
La historia del emprendimiento familiar comenzó en el año 2000, cuando el padre de Matías inició la plantación de olivos. Tras su fallecimiento en 2008, la madre y los hijos continuaron el proyecto, que en 2018 incorporó la maquinaria necesaria para producir su propio aceite.
“Es un emprendimiento chico, artesanal, pero con mucho trabajo y cuidado. Nosotros cosechamos y procesamos en menos de 24 horas, usamos acero inoxidable y controlamos la temperatura para garantizar la calidad. Eso marca la diferencia”, detalló el productor.
Actualmente, Familia Kanje comercializa su aceite principalmente a nivel regional y nacional, con un puesto de ventas en verano en el olivar, camino al puerto de San Antonio Este, y con envíos a todo el país a través de redes sociales y WhatsApp 2920 49-0072 / +54 9 2920 47-1625. También se distribuye en comercios locales como Almacén Ibérico, Jamón del Medio y Fábrica de Pastas Tajamar. Además, la firma ampliará su producción con aceites saborizados (limón, naranja, albahaca, romero) y cosmética artesanal a base de oliva.
El premio internacional llega en un momento clave para el desarrollo turístico de la región. En la reciente Feria Internacional de Turismo (FIT), se presentó la propuesta de incluir a los olivares de San Antonio en un recorrido turístico. “Este reconocimiento no es solo nuestro, sino también de la zona. El clima, la cercanía al mar y las horas de frío son factores que hacen únicos a nuestros olivos. Por eso sentimos que es un premio para todo el este de Río Negro”, afirmó Kanje.
El productor adelantó que la familia continuará trabajando para mantener la calidad y buscar nuevas distinciones en los próximos certámenes internacionales. “Este primer concurso nos confirma lo que sabíamos: hacemos un aceite de excelencia. Y ahora el desafío es seguir creciendo, siempre representando a nuestra tierra”, concluyó.