De acuerdo con lo planteado por Kenneth Gergen (1994/1996), la identidad es una construcción social que tiene lugar en forma permanente. El contexto sociocultural desempeña un rol fundamental en este proceso, en tanto establece los patrones a partir de los cuales les sujetes se hacen inteligibles frente a la sociedad.
El conjunto de leyes que regulan el funcionamiento de un Estado forma parte de este contexto y, consecuentemente, influye en la construcción de las identidades.
Vivimos en un orden social que implica, entre otras cosas, la existencia de un sistema binario de sexo/género que impone la existencia del género como algo estable a lo largo del tiempo (una «identidad») y la correspondencia, dentro de esa entidad, entre el género arbitrariamente asignado en el nacimiento (a partir de determinadas características anatómicas) y la vivencia personal de género (Butler, 1990/2007). Este orden social también busca regular la sexualidad de las personas a través de la presentación de la heterosexualidad como característica de naturaleza humana.
Argentina y en Latinoamérica, el colectivo trans es uno de los más vulnerados históricamente en lo que a derechos humanos respecta y es en ese sentido que los legisladores Mandato Cumplido Graciela Valdebenito, Julia Fernández y Roxana Fernández y el legislador Juan Elbi Cides trabajaron una Ley Integral para las Personas Trans, con el objeto de asegurarles el ejercicio pleno y en condiciones de igualdad de sus derechos y libertades, promoviendo el respeto de su dignidad, buscando lograr la integración social a nivel cultural, económico- laboral, en el ámbito de la salud y la educación, así como en cualquier otro ámbito de la vida ciudadana en la Provincia de Río Negro.