La urgente necesidad de mellar de algún modo el inexorable avance de Juntos en las preferencias del electorado de nuestra ciudad, ha llevado a sectores de la vida política de San Antonio Oeste a hacer lecturas malintencionadas de algunas declaraciones efectuadas por la Gobernadora electa Arabela Carreras respecto de un tema sensible como es la energía nuclear. A pesar que en algunas entrevistas radiales, al abordar el tema, siempre dejó aclarado que “sin consenso social no habrá avances de ningún tipo en esos proyectos”, intentaron ponerla en el rol de favorecedora de una central nuclear.
Siempre en esa línea, la próxima mandataria provincial dijo que “dependerá (dar luz verde a una central nuclear) del gobierno nacional que gane y lo que impulse”, y recordó que tiene su residencia en Bariloche “a un kilómetro de una central nuclear, es decir: a mí no me asustan las centrales nucleares”.
Obvio que algunos se aferraron solo a un aspecto de sus dichos, por lo tanto es falso un apoyo (implícito o explíticito), al empleo de esta tecnología en la provincia.
De hecho, -como funcionarios responsables y representantes del pueblo de Río Negro- son conocedores de que en la provincia rige una Ley que prohíbe la instalación de ese tipo de centrales en territorio rionegrino, la cual fue aprobada en agosto de 2017 con el voto favorable del legislador Casadei.
La gobernadora electa en un medio radial de San Antonio Oeste fue consultada sobre una nota referida a que el kirchnerismo busca reflotar el Plan Nuclear, en caso de ganar las elecciones generales: “No se puede avanzar en ningún proyecto, sea nuclear, turístico, minero o pesquero si no hay consenso social. Si la sociedad no percibe que ese proyecto le va a mejorar la calidad de vida, pues entonces es inviable”. (MESA SAO JUNTOS SOMOS RIO NEGRO)