El representante de los pescadores artesanales de San Antonio, Alejandro Sarmiento, informó que ya tuvieron como sector una primera reunión con la nueva subsecretaria de Pesca de la provincia, Jessica Ressler, planteando que se han venido dando permisos a embarcaciones de otras jurisdicciones “y eso no es beneficioso para los sanantonienses”. “Queremos que se regularice el tema de los permisos de pesca para los buques que están en el puerto de San Antonio Oeste (SAO)”, aseveró.
Sarmiento, que podría dejar de ser el delegado de ese sector en los próximos días, dijo que la demanda apunta a cuidar el recurso, priorizar la mano de obra local y que no vengan barcos foráneos a hacer la temporada y se van, como ha pasado con el langostino.
Desde el gobierno se informó que la designación de la funcionaria, en reemplazo de Jorge Bridi, apunta a una reestructuración que fortalezca la tarea del área generando mayor valor agregado, más mano de obra y un nuevo movimiento económico.
Sarmiento reconoció que periódicamente tienen problemas porque “están viniendo barcos de otros lugares sin permiso, llegan a San Antonio, consiguen los permisos y salen a pescar”, con lo cual las flotas son mayores “y esto implica una merma del recurso”.
Dijo que en los últimos años se dio la presencia de langostino que ha sido importante, pero “a su vez se suman todos los años muchas embarcaciones lo que no es beneficioso para nosotros”.
Recordó que es la Subsecretaría de Pesca provincial la que otorga los permisos, mencionando que “hace tres años firmamos un acuerdo que no se habilitarían nuevos barcos para no afectar a la pesca artesanal, pero eso duró unos meses y después se fueron sumando, hoy hay muchísimas embarcaciones y eso no es beneficioso para los sanantonienses”.
Tras la reunión con Ressler, indicó que “esperemos que la Subsecretaría se ponga a trabajar en esta dirección que nosotros planteamos”.
Al consultársele si la captura de barcos comerciales se lleva a otro puerto ajeno a San Antonio Oeste, dijo que “todo lo que se pesca en provincia, en el golfo, debería entrar al puerto de SAO y procesar toda la mercadería acá, con excepción precisamente de los artesanales que a veces sacamos mercadería entera, como merluza, langostino, mariscos, que van directos a góndola, en tanto que se procesa lo que va a industria”. “Hay algunas plantas que absorben permisos de pesca de barcos que no tienen planta y superan lo que ellos pueden procesar, así que esa mercadería se estaría yendo sin procesar, sin generar mano de obra en San Antonio”, indicó.
Ejemplificó que “tenemos plantas que en plena temporada tienen 7 u 8 permisos de barcos pesqueros cuando deberían tener 3 como máximo, pero como no está reglamentado el tema de los permisos pasa esto”, sobre todo a partir del langostino, antes con la merluza no se podían dar más que tres, había un cupo máximo.
Destacó que los pescadores artesanales “nos costó mucho esfuerzo llegar a tener una lancha, no nos cayó del cielo, 20 o 30 años por ahí tardamos para independizarnos y tener lo que tenemos, y somos 400 familias que viven de esto; la planta que ganamos queda toda en San Antonio”. (APP)