Los tres casos puntuales ocurrieron en Las Grutas, San Antonio Oeste y Viedma.
Durante la semana se dieron estafas y varios intentos en la región. Metodologías distintas, pero que llegan al mismo fin: engañar a personas. Entre los casos, dos que sí se llevaron adelante y otro que no llegó a concretarse, vinculado a la sustracción de datos personales a través de mensajes vía correo electrónico con el fin de acceder a sus cuentas bancarias.
El primero ocurrió en Las Grutas. Una mujer de El Bolsón alquiló vía Facebook un departamento en la calle Yaminué al 100, en la ciudad balnearia. Le transfirió 9 mil pesos como seña al supuesto dueño de la propiedad y a los pocos días emprendió sus vacaciones, con la ilusión de descansar y relajarse.
Cuando llegó al lugar, se encontró con que ahí no había nada para alquilar y que no existía ninguna persona Ruiz -apellido de quien ella había hablado-. Se acercó a la comisaría N° 29, realizó la denuncia, pero claro, el daño económico ya no podrá ser reparado.
Por otro lado, en San Antonio Oeste, un joven contactó a una financiera por Facebook. En el medio de la negociación, le pidieron los datos personales. A los pocos minutos, la persona en cuestión le dijo que le había depositado 23 mil pesos por error y que tenía que devolverlos a una cuenta a nombre de una mujer de apellido Ruiz.
Advertido por las sospechas, llamó a la casa central para interiorizarse y allí le informaron que ellos no se comunican por redes sociales. Claro, la averiguación la realizó una vez que se metió en su cuenta y notó que esa transacción nunca se realizó y de haber devuelto un dinero que nunca tuvo en su poder.
El tercer caso quedó solo en un intento y ocurrió en Viedma. Lo que llama la atención, es que en los tres casos se repite el apellido Ruiz, por lo que se cree que es una banda que está actuando en la zona. Ante esto, se pide mayor atención a la población a la hora de alquilar a distancia o brindar datos personales.
En este caso local, un hombre recibió un correo electrónico en el que le informaban que supuestamente había pedido un préstamo de 35 mil pesos y que debía ingresar a un link que le habían dejado. Al no ser cliente del banco informado se percató de lo que se trataba y fue a realizar la denuncia pertinente.