El jueves, en un día muy ventoso, guardas ambientales del Área Natural Protegida Bahía San Antonio recibieron un llamado de la maestra Natalia Reppucci, del Jardín Huellitas del Sur, quien junto con sus compañeras esperaron a especialistas para ir a buscar un chorlo cabezón que estaba en el sector de juegos de la escuela, a reparo del viento. El pájaro estaba en buen estado.
“Respondimos rápido a su llamado, antes de partir a nuestra guardia en el Puerto del Este”, explicaron las guardas ambientales.
Luego de chequear que el ave se encontraba en buen estado, se lo liberó para que continúe su natural camino.
Por otra parte, técnicas del Área Natural Protegida llamada Bahía de San Antonio explicaron que las playas de San Antonio Este (uno de los tres ejidos que componen la ANPBSA) tienen la particularidad de estar cubiertas por valvas y caracoles, algo natural, que se creó con el correr de muchos años y que hace que esas playas sean tan particulares.
“Te contamos el porqué no recolectar ni llevarte los caracoles y las valvas de las playas”.