El sueño de crear una biblioteca, en el ensanche sur comenzó un 8 de mayo de 1988, la inquietud nació de un grupo grande de vecinos, principalmente de mamás que les preocupaba no contar con material didáctico y un lugar donde sus hijos y nietos pudieran recurrir a buscar información o realizar las tareas escolares.
Desde que se fundó como institución, la biblioteca ha logrado insertarse y ser reconocida primero, en su sector de origen, compuesto principalmente por los barrios San Cayetano y Cruz de Sur y después en el resto de la comunidad de San Antonio Oeste.
“Su comienzo fue una pequeña colección de libros, (49) ejemplares, lo cuales no estaban todos en buenas condiciones y una pequeña estantería que los contenía. Hoy la biblioteca tiene una colección bibliográfica compuesta de más de 8.000 libros, estanterías, mesas, sector infantil, siendo los niños y adolescentes, los grandes usuarios de la biblioteca, esta tarea que no hubiera sido posible sino hubiéramos contado con el acompañamiento de los vecinos, que a lo largo de estos años se han hecho presente donando libros que se ponemos a disposición de nuestros usuarios” mencionó Carlos Kalbitzki.
“El trabajo que realiza la biblioteca popular Quiero Aprender no solo es el de ser un centro de difusión cultural, sino que trabaja en la cuestión social y la integración comunitaria apoyando a las familias de escasos recursos, que no pueden adquirir el material bibliográfico que se les pide en los colegios” agregó “la cantidad de personas que reciben apoyo de nuestra biblioteca, está dada por la conformación de los barrios que la circundan, más de 4.000 personas”.
“La biblioteca brinda un lugar calido, confortable, de contención social y de ayuda escolar, brindadoles a todos una taza de mate cocido o te con galletitas que se paga con los fondos propias o con ayuda de vecinos, además de tener un pequeño ropero comunitario que ayuda con ropa y calzado a algunas familias de nuestro sector que lo necesiten”.
“La biblioteca popular Quiero Aprender proporciona un espacio físico donde la gente se puede congregar, compartir experiencias, haciendo su aporte solidario en este sector de la localidad, mayoritariamente habitado por pescadores y trabajadores portuarios” añadió “la biblioteca ha perdurado en el tiempo porque es una creación social de la gente del barrio” indicó uno de sus iniciadores.