La esquina de San Martín y Ramos Mexía de San Antonio Oeste es ya un sitio histórico, símbolo de la constancia de quienes llegaron a esta localidad a hacer futuro y pilar de la sociedad.
Olimpio Repucci comenzó sus actividades el 17 de marzo de 1958 realizando hasta ahora una impecable labor frente a su tradicional peluquería. InformativoHoy se acercó a conversar con el decano de peluqueros en la ciudad y comentó lo siguiente:
“Primero quiero agradecer a toda la gente que nunca me han abandonado en tantos años y prácticamente le he cortado el pelo a cuatro generaciones, al abuelo, al hijo, al nieto y al bisnieto y Gracias a Dios no me ha cansado la profesión porque es algo que me gusta”.
“Comencé en esta cuadra donde estoy hace 56 años, pero antes estuve en una casa de chapa en Belgrano y 6 de enero, que ya la desarmaron, solo está el terreno baldío, en un saloncito de chapa y madera, al primer cliente que le corté desde ese momento aún sigue viniendo, era un chico que jugaba al fútbol en la calle y los padres le enviaron a cortar el pelo, fue a buscar la plata y se sentó, lo recuerdo como si fuera hoy, ese fue el primer cliente. Después comenzaron a llegar dos o tres más, esa tarde gané el alquiler de una semana, allí estuve casi cuatro años y después se desocupó uno de estos locales donde trabajan ahora las oficinas municipales en San Martín 480, desde 1962 hasta 1972, después me hice mi propio lugar en San Martín 420 y ahora 29 años que estoy en esta esquina y por ende 56 años en esta cuadra”.
“He visto muchos cambios en la moda que se han producido hasta en la tecnología que uno nunca se imaginaba íbamos a ver, hemos llegado Gracias a Dios con 60 años de actividad y no sé cuánto seguiré, pero tengo ganas de seguir todos los días”.
“En aquel entonces no había escuela de peluquería como hoy en día, ahora en seis meses hacen un curso y se largan a trabajar, antes aprendíamos mirando a otro “haciendo banco”, yo aprendí con Juan Pedro Bernabé tres años a su lado, luego me largué solo” agregó que “uno cuando tenía en esa época 12 o 13 años pensábamos en el futuro, que íbamos a ser en esta vida, soy hijo de inmigrante que llegó aquí porque tenía a mi tío, el hermano de mi padre, por eso cuando llegó papá tuvo trabajo inmediatamente, ya asentado nos mandó a buscar a Italia a mi madre y mis hermanos, pero yo me quedé aquí con mi tío Pascual Repucci a ayudarlo ya que mi familia después se trasladó a otro lugar cercano”.
“En ese tiempo, uno quería tener un oficio como dije lo aprendí practicando, una curiosidad es que en aquel entonces había cerrado una peluquería en Río Colorado y compré este sillón que debe tener cien años, porque cumplió 60 conmigo y tenía muchos, más de 40 cuando lo adquirí, aún sigue siendo muy cómodo y varios de mis clientes lo saben bien, los que son mis fieles clientes y casi son parte de la familia, además terminamos siendo los confidentes de muchos, unos hablan de sus cosas, otros se relajan, en verdad este oficio es muy noble, porque con una tijera y un peine te defendes en cualquier parte del mundo, esa son mis herramientas de trabajo”.
“Lo único que deseo este sábado es arrancar como todo los días y hacer mi labor, ese será mi festejo, lo que hice siempre en cada día de estos 60 años en mi querido San Antonio Oeste”.