María Rosa, madre del pequeño Pedro Nicolás de 11 años, señaló a InformativoHoy que su hijo se encuentra padeciendo tras una operación de apendicitis en el hospital local “a él lo llevé con fuertes dolores de panza, lo atendió un médico y solo le dieron calmantes por el dolor porque según dijeron que no tenía nada, eso fue el 22 y lo largaron el 25”
“dos días después lo volví a llevar con dolores muchos más fuertes, llaman al cirujano y descubre que es apendicitis, allí lo operan inmediatamente y le dejan un drenaje. Tras cuatro días comenzó a largar algo podrido por la herida, la médica de guardia que es la doctora Iaquinta se da cuenta y manda a llamar al cirujano de apellido Coronel, recién aparece al otro día todo eso porque comenzó a largar caca por el drenaje”.
Tras la segunda operación que duró dos horas y cuando despertó empezó fon dolores terribles, el cirujano le admite que tenía una gran infección y que limpiaron lo que pudieron, esto fue el 31 de mayo.
Posteriormente la madre relató que no dejaron que lo vuelvan a tocar al niño y pidió que lo envíen a Viedma porque seguía largando fuerte olor por el drenaje y el médico le manifestó que no era normal “ahí le dije que no me lo tocan más y me lo mandan al Zatti, lo llevaron en ambulancia con un simple papel sin historia clínica, allá me dijeron que le hacían una tomografía y me lo devolvían a San Antonio, me puse firme porque no me lo querían dejar, sino solo hacerle una revisión, los médicos de Viedma se portaron muy bien y quedó internado varios días con antibióticos, para sacarle la infección que tenía internamente” según expresó María Rosa en el Zatti lo dejaron internado más de una semana “quedó dentro una fístula que se comió la infección y por eso empezó con el problema, allá lo descubren, si lo hubiera dejado acá iba a generar una infección generalizada, eso me dijeron en Viedma”.
Aún tiene el drenaje, por lo que esperan que solo se vaya cerrando mientras sigue con medicamentos en la casa “mi hijo era un chico sano que entró con dolores, no supieron ver que era una apendicitis, como puede ser que varias horas después sepan, después de la operación pasó un calvario pobrecito no daba más de dolores pedía por favor” indicó además que en el hospital capitalino lo atendieron psicólogas por la situación en que los médicos lo encontraron.
“Mientras tanto estamos con las bolsitas cambiando cada día, no merece que esto le pase a nadie, a ninguno, por eso lo hago público” remarcó María Rosa que las enfermeras de San Antonio se portaron muy bien.
Pedro Nicolás jugaba al fútbol en la categoría 2005, va a la Escuela 6 y ahora le enviarán una maestra domiciliaria. Mientras que el día 15 debe ir nuevamente a Viedma para seguir con el tratamiento.
María Rosa comentó que cuando termine esta situación están estudiando realizar acciones legales, para ello ya consultaron con una abogada local.