El Club Defensores del Golfo de San Antonio Oeste vuelve a dar que hablar en el ámbito futbolístico. Bajo la coordinación de Matías Baluzynski, un grupo de jóvenes promesas de la región viajó a La Plata para participar de una exigente prueba en el Club Estudiantes, una oportunidad única para mostrar su talento ante captadores del fútbol profesional.
La historia comenzó en febrero, cuando Matías Ortiz, captador del club platense, se contactó con Baluzynski tras detectar potencial en varios jugadores locales. A partir de allí, se inició un camino de trabajo conjunto que permitió a los chicos entrenar y prepararse para futuras pruebas. Luego de una primera experiencia en Sol de Mayo (Viedma), que no permitió una evaluación adecuada por el gran número de participantes, surgió la posibilidad concreta de recibir a Ortiz en San Antonio, donde se llevó a cabo una prueba más enfocada y organizada en marzo.
Gracias al apoyo del Club Defensores del Golfo, que facilitó hospedaje, comida y espacio para la prueba, el encuentro se realizó con éxito, permitiendo que varios chicos fueran seleccionados para una instancia superior. Así, esta semana, seis jóvenes futbolistas de San Antonio Este están probándose en las instalaciones de Estudiantes de La Plata:
- Joaquín Veroiza (2009)
- Tiago Romero (2009)
- Benjamín Pasos (2010)
- Alberto Cejas (2010)
- Lorenzo Melinger (2015)
- Alexis Baluzynski (2016)
Matías, entrenador y referente del grupo, acompaña a los chicos durante esta travesía que no solo es deportiva, sino profundamente formativa. “La experiencia es relinda, estén o no estén a la altura de lo que buscan ahora, se llevan muchísimo aprendizaje para seguir creciendo”, expresó Baluzynski, quien también destacó la emoción de reencontrarse con exjugadores locales que hoy ya forman parte del plantel juvenil de Estudiantes.
El grupo ha sido testigo del nivel de competencia nacional, enfrentándose en las pruebas con chicos de todo el país. Además, valoraron la cercanía de las instalaciones y el profesionalismo con el que fueron recibidos por el club.
No todo ha sido sencillo: el terreno sintético, al que no están acostumbrados, generó molestias físicas en algunos jugadores mayores. Sin embargo, el entusiasmo y la voluntad de aprender superaron cualquier dificultad.
Baluzynski también aprovechó para agradecer profundamente al pueblo de San Antonio, que se movilizó para ayudar a costear este viaje. “Vendieron pollo, choripanes, pan casero, números… y la gente respondió. Gracias a todos los que pusieron el hombro para que estos chicos pudieran estar acá”, enfatizó.
La prueba continúa esta semana, con nuevas instancias para cada categoría. Desde el entorno del club y la comunidad, todos están atentos y expectantes, celebrando el camino de estos jóvenes y soñando con ver a alguno de ellos, algún día, debutando en el fútbol grande.