La distribuidora del servicio eléctrico en Río Negro recorre la provincia enfocada en la metodología de cálculo.
A lo largo de este año, la distribuidora Edersa ha venido recorriendo la geografía provincial con una “Campaña de Medición” que permitirá determinar la metodología de cálculo de las tarifas en un futuro. El objetivo es definir las diferentes demandas, las necesidades de los diversos segmentos de usuarios y su participación en la demanda total de potencia energética.
“La Campaña de Medición se inició en marzo de este año y, hasta la fecha, ya hemos registrado a unos 280 grandes usuarios de diferentes regiones de Río Negro. Planeamos finalizar el año instalando unos 400 equipos para disponer del perfil de carga (registro de potencia cada 15 minutos, entre otras variables a medir) de cada uno de ellos. Todos los equipos cuentan con sistemas de telemedición, y para el próximo año el objetivo es duplicar esa cantidad”, explicó Marcelo Ávila, jefe del Departamento de Energía y Tarifas de Edersa.
¿En qué consiste y por qué es tan importante realizar una campaña de medición?
Esta iniciativa permite determinar dos aspectos clave:
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La participación de cada actor (residencial, comercial o industrial) en los momentos de máxima demanda de potencia dentro del sistema de distribución de energía.
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La definición precisa de la asignación y responsabilidad de cada categoría tarifaria en función de esa participación.
“Con los datos obtenidos de las telemediciones, podremos calcular factores de uso y demanda, porcentajes de participación de los diferentes segmentos en el consumo de energía en diversas franjas horarias, así como factores de potencia y de simultaneidad. Es fundamental modelar y entender el comportamiento de todos los usuarios en términos de demanda de potencia. También mediremos los niveles de tensión para analizar, si es necesario, los estándares de calidad”, agregó el ingeniero.
Avances en la tecnología de medición
Hasta 2018, Edersa realizaba sus campañas de medición de forma manual, sin las ventajas que hoy ofrecen las tecnologías avanzadas de medición y comunicación. “En la campaña anterior, que culminó en 2018, se tomó una muestra de 800 puntos de medición, incluyendo usuarios residenciales, comerciales e industriales. Para ello, se contrató personal especializado y se utilizaron equipos propios en el Valle, la zona Atlántica y la Región Sur-Andina. Periódicamente, se acudía a los lugares para registrar manualmente los datos del perfil de demanda”, detalló Ávila.
Gracias a una importante inversión tecnológica, el proceso de muestreo ha mejorado significativamente. “Sabemos que, dentro del universo de usuarios de Edersa, el 50% de la demanda corresponde a usuarios residenciales, comercios y pymes, mientras que el otro 50% se asigna a los denominados Grandes Usuarios. De estos, alrededor de 700 representan el 40% de la demanda total. Por ello, comenzamos por medir a este grupo, ya que, al comprender su comportamiento, podemos inferir el del resto. Este trabajo permitirá asignar los costos de distribución de energía de manera más justa, en función de la responsabilidad que cada usuario tiene en el sistema, y diseñar los nuevos esquemas tarifarios”, explicó.
Complejidades técnicas y logísticas
La “Campaña de Medición” tiene una alta complejidad técnica y logística, con un presupuesto estimado de 120 millones de pesos al cierre de este año. “El proceso de telemedición tiene sus particularidades. Una vez seleccionado el usuario, se debe monitorear la calidad de la señal de comunicación durante un intervalo de tiempo antes de activar el equipo de manera definitiva y vincularlo al sistema de telegestión adquirido por Edersa. Esto requiere al menos tres visitas por suministro para completar el proceso”, detalló Ávila.
Otra dificultad radica en la gran dispersión geográfica del área de concesión de Edersa, que abarca la mayor cantidad de kilómetros en todo el país. “En nuestra área de concesión, los Grandes Usuarios suelen estar muy dispersos, frecuentemente en zonas rurales. Esto exige redoblar esfuerzos para sumar nuevas telemediciones en las diversas regiones de Río Negro”, concluyó Ávila.
