Después de las elecciones del pasado domingo, el dato destacado es que las urnas ratificaron el carácter impredecible de nuestra sociedad. Tan impredecible como la política, lo que sucedió el lunes inmediato, cuando Macri direccionó a su gente hacia una alianza con Milei y provocando la ruptura del Juntos por el Cambio.
El ex presidente busca adueñarse del voto antiperonista, a costa de provocar un sisma en la misma coalición que él mismo buscó para gobernar. Esta maniobra política arroja luz sobre la volatilidad que caracteriza la política argentina en estos tiempos de cambio.
En Río Negro, la Unión Cívica Radical se reúne este lunes, cuando se cumplen 40 años del triunfo de Raúl Alfonsín, prócer radical al que veneran hasta las lágrimas y denostado hasta el hartazgo por el líder libertario. No le van a perdonar nunca a Milei las palabras nefastas contra el padre de la democracia moderna en Argentina.
Seguramente la decisión de las autoridades radicales rionegrinas es seguir en tono con el documento emitido por la conducción nacional del partido: prescindir en el voto presidencial en el balotaje, dando libertad de acción a sus miembros. Esto refleja la división que ha surgido dentro de esta coalición de centro derecha en Argentina.
El PRO provincial también va en franca división, con Juan Martín apoyando la decisión de Bullrich, mientras que otros miembros del partido se inclinan hacia la unidad con Milei. Esta fractura interna presenta un desafío significativo para el partido, que debe encontrar un equilibrio entre sus diferentes facciones.
Por ejemplo, desde el ejido sanantoniense que se expresaron a favor de la unidad con Milei y los que antes renegaban de Lorena Villaverde hoy deberán hacer campaña en conjunto.
Tortoriello, por su parte, ha anunciado su apartamiento y la fundación de un partido provincial, alejándose de los republicanos y buscando ser otra alternativa electoral. Esto refleja el deseo de algunos políticos de buscar una identidad política independiente en medio de las divisiones partidistas.
JSRN se alinea a Sergio Massa, con la gobernadora saliente Arabela Carreras y el ingresante Alberto Weretilneck mostrando su apoyo al actual ministro de economía. Esta alineación destaca la búsqueda de estabilidad y apoyo financiero por parte de los gobiernos estatales y comunales en un contexto económico desafiante.
Los intendentes «juntistas» también han manifestado su apoyo al candidato de Unión por la Patria, subrayando la importancia de la cohesión en el ámbito local para abordar los desafíos actuales. Inició Pesatti, siguió Pogliano, sucesivamente irán manifestando, posiblemente Adrián Casadei lo concrete esta semana.
La política argentina se presenta, una vez más, como flexible y dinámica, permitiendo a los actores políticos alinearse en función de las necesidades financieras y de gobernabilidad. Por tanto, no es sorprendente que propios, aliados y no aliados se expresen en contra de la coalición Macri – Milei, buscando un camino que les permita lidiar con las complejidades y desafíos que enfrenta el país en la actualidad.
Quitarse la incertidumbre política con la búsqueda de soluciones financieras y sobre todo que pueda ser con gobernabilidad son los temas predominantes en el escenario político argentino, que poco a poco va siendo también la agenda de los votantes. (Carlos Aguilar, editor)