San Antonio Oeste va a las urnas esta jornada histórica dónde los ciudadanos con su voto elegirán al nuevo intendente.
También renovarán todas las bancas de la legislatura comunal.
Indefectiblemente el Concejo Deliberante lo presidirá una mujer, ya que las tres fuerzas mayoritarias en la nómina representativa, la encabezan el género femenino. No es la primera vez, pero es importante que así sea, ante el marcado machismo que aún existe en la política local.
Algún día llegará la posibilidad de que una mujer sea intendenta del ejido sanantoniense, sería un avance sustancial.
Pero en el contexto existente, se debe optar por los postulantes que quieren reemplazar a Luis Ojeda. El actual intendente se aleja, por ahora, la política representativa, aunque no de la partidaria.
Ojeda deja en marcha un presupuesto anual estimativo de 500 millones de pesos. El 70%, unos 375 millones se destina a salarios.
Actualmente hay 454 empleados municipales, entre efectivos y contratados. Varios han ingresado en las últimas semanas.
El intendente tiene un plantel de al menos 25 funcionarios, le que menos gana es 52 mil pesos por mes y Ojeda con otros 8 secretarios incluidos delegados de SAE y Las Grutas promedian cada uno los 110 mil pesos.
Los concejales ganan como mínimo 85 mil pesos (el presidente del deliberante 105 mil) y los revisores de cuentas, también como mínimo 42 mil pesos.
La planta política de esos 375 millones se lleva el 19%, unos 72 millones de pesos para este año.
Al municipio solo le quedarían 125 millones de pesos anuales para cumplir con los servicios, obras públicas y asistencia.
Muchas de las obras se solventa con venta de tierras, pero este año no ingresó lo esperado.
También deben cumplir con juicios y otras erogaciones.
Además, la municipalidad debe afrontar con al menos 9 millones de pesos para esta temporada en guardavidas, con la actualización en paritarias sería ese el monto.
Estos simples números es el desafío económico por el cual debe enfrentar el próximo mandatario comunal, cualquiera sea el signo político.
Durante los últimos años se priorizó el pago de salarios y se negoció las mejores paritarias posibles, eso es un logro del gobierno que no dejó de abonar a los empleados y también regularizó con los proveedores.
Lo pendiente aún es la escasa infraestructura con la modernización del estado. Ojeda debió campear contra rivales internos, una economía en crisis y las situaciones judiciales.
No fue un buen gobierno el del actual intendente. Debió continuar con muchos de los funcionarios que venían desde años, no renovó, ni transformó, incluso sumó otros que no le aportaron nada importante para subrayar.
Párrafo aparte para el secretario de hacienda Joaquín Landivar, quien pudo ordenar los números y destacarse por el resto de muchos de quienes, por al menos dos lustros, venían cumpliendo funciones.
Por esto Jorge López, si gana la contienda, es el único confirmado para el próximo período.
En cambio, si Casadei triunfa, esa silla es para Diego Colantonio, que deja su banca de concejal.
Ambos contadores, jóvenes, tendrán que enfrentar una dura economía futura.
La situación es muy compleja, el nuevo presidente que asuma se va a encontrar con una administración dominado por los capitales externos. Perón ya lo había dicho: “La economía y el libre mercado son sólo afirmaciones para el consumo de los tontos e ignorantes. La economía nunca es libre, o la controla el Estado en beneficio del pueblo, o la controlan las grandes corporaciones en perjuicio de este”.
Cualquier parecido con la realidad actual es mera coincidencia. (Carlos Aguilar @caa174)