El peronismo rionegrino no encuentra recomposición. El 17 de octubre, una fecha que debería ser de celebración y conmemoración, se convirtió en un escenario de reproches, enconos y frases cruzadas donde los distintos sectores del movimiento se apuntaban entre sí. Por el momento, el camino hacia la unidad parece lejano.
Los principales actores, Martín Doñate y Martín Soria, siguen disputándose el territorio, como ha sido la tónica en los últimos tiempos. Esta fragmentación favorece al oficialismo provincial. El hecho de que el peronismo se presente dividido e incluso un exjusticialista, como el actual vicegobernador Pedro Pesatti, pueda liderar la lista de senadores del partido provincial, es una ventaja para JSRN.
La escasa concurrencia al acto del jueves en la Plaza Centenario por parte de los adeptos del peronismo sanantoniense refleja claramente la situación local. Tras 12 años de gobierno municipal, el peronismo de San Antonio Oeste ha quedado casi en el ostracismo, con una diáspora significativa de dirigentes. Actualmente, ni siquiera cuentan con un representante en el Concejo Deliberante.
En el plano nacional, tampoco hay un apoyo a candidato unificado. El peronismo de la unidad básica “Benito Martino” no toma posición al respecto. En el contexto provincial, sin embargo, algunas figuras emergen con fuerza y allí apuntarían los sanantonienses: Pablo Barreno en la zona atlántica y María Emilia Soria se perfilan como los referentes más destacados.
El gobernador, de visita en San Antonio Oeste el pasado sábado, evitó referirse en los medios a la situación política provincial y se centró en el reacomodamiento de la política en el contexto nacional. Reconoció la grave recesión económica y los problemas financieros actuales. Además, afirmó que no habrá aumentos salariales por el momento, ya que los sueldos ya se han liquidado y que los aumentos superaron la inflación, refirió que las futuras negociaciones dependerán de cómo evolucionen las conversaciones con los gremios. Si bien no mencionó a UNTER, destacó que el diálogo está abierto, siempre y cuando los conflictos cesen.
En cuanto a la promoción turística, el gobernador hizo hincapié en la necesidad de intensificar la publicidad de Las Grutas antes de la temporada estival, esto lo expuso previo a lo que será el debate sobre el rol y la creación de una Agencia de Turismo.
El EMPROTUR del ejido sanantoniense debería asumir un papel más activo en la promoción, pero hasta ahora no ha tomado decisiones claras al respecto. No se trata solo de pautar en medios, sino de llevar adelante una estrategia enfocada en atraer turistas de provincias cercanas, que son las que aportan el mayor flujo de visitantes. Sin embargo, el Ente de Turismo parece más preocupado por apoyar eventos y sorteos locales que por lanzar una verdadera campaña de promoción.
Existe una actual falta de política turística clara por parte de la municipalidad de San Antonio Oeste. En años anteriores, había una visión evidente sobre lo que se quería lograr y cómo hacerlo, pero hoy en día todo parece estancado en aspectos poco esenciales.
Además, la transición que propone el gobierno de Weretilneck, de convertir el área en una agencia, hoy se carece de un trabajo conjunto con los municipios, lo que profundiza aún más esta parálisis local. Esto se evidenció durante el reciente fin de semana largo de octubre, donde hubo un movimiento interesante de turistas, pero faltaron opciones y ofertas adecuadas.
A futuro, se esperan importantes inversiones en la zona atlántica. Desde esta columna, subrayamos la importancia de estar a la altura de esa masividad de servicios que acompañarán dichas inversiones. No obstante, parece que algunos no son conscientes de la magnitud de lo que está por venir, tal como lo expresó el gobernador en su discurso, enfatizando la necesidad de estar preparados para afrontar estos cambios.
