Vaya interna que tiene el partido gobernante a nivel provincial. Esto se acreciente fundamentalmente por la prontitud en los cierres de listas para las elecciones y Alberto Weretilneck, alentado por una encuesta favorable de vaya a saber de quién y de dónde, apuntalará la postulación de Agustín Domingo.
Tampoco al líder juntista le pasa por alto la destitución de Nancy Perrilli y las expresiones de su alter ego Elbi Cides, del MPP, columna vertebral de JSRN señalando “no compartimos la decisión de la Gobernadora” y que el despido se planteará a nivel partidario, porque este ya es el octavo cambio en el gabinete de la actual mandataria, desplazando “albertistas”.
Pero para aumentar las intestinas diatribas, la intendenta de Allen sumó su granito al indicar que el candidato a diputado será por consenso, sin olvidar las expresiones de Casadei y Genusso a favor de Pogliano.
Muchos de los afiliados hablan de las contrapartes “están los del gobierno que responden a Weretilneck y los que se reportan a la gobernadora” porque Arabela también tendría su candidata y sería Mercedes Iberó.
Si el oficialismo tiene este problema político, los opositores tienen bastante inconvenientes para definir sus futuras listas. Los partidos mayoritarios en Río Negro están en constante convulsión.
El ejido sanantoniense también está en persistente efervescencia. Tras los sucesos de la feria de la plaza de la Confluencia, dónde además hay que mencionarlo, existe otro trasfondo, se van empezando a ver manos que quieren posicionarse para el 2023, por fortuna terminó todo en un acuerdo y con la potencial salida de un funcionario.
Para los tiempos que corren, se debe estar a la altura de los mismos, “no se puede pifiar” en nada. Si un funcionario tiene un desliz o un descuido, eso es la muestra que los vecinos utilizan para justificar romper las reglas.
El intendente dijo a su entorno más cercano esta semana “no puede ser que todo lo deba solucionar, para que tengo un plantel amplio, para que zanjen los inconvenientes”, quizá por eso la gente solicita la garantía del propio intendente, los funcionarios aún no generaron esa confianza.
Tampoco el mandatario comunal no puede permitir el descuido, se paga con el puesto. Por eso Casadei elaboró crear la Secretaría de Fiscalización General y situar posiblemente en ese cargo a Guillermo Martín. Dentro de esa cartera sumaría inspección general, comercio, fiscalización y tránsito, con el acompañamiento de Mario Hernández.
No va a ser de un día para otro, porque llevará una organización, dialogar con los empleados, con los gremios, sobre todo, obtener el respaldo necesario para las actuaciones. También conversar con los jueces de faltas y así lograr perseverar una faena difícil en estos tiempos de cuarentena.
No es solo lo único que se comunicará, también habrá nuevos ejes de gestión que se anunciarán en el día del pueblo.
Del mismo modo, poco a poco los vecinos se van a empezar acostumbrar a nuevas alianzas locales, ya que probablemente ex legislador Javier Iud, pasaría a ser parte del espacio gubernamental rionegrino, como posible subsecretario de pesca.
La salida de Bridi, un técnico que le era cómodo a todos los gobiernos, pateó el tablero del ministerio de la Producción al irse, en evaluación ante la situación que se avecina, que tiene que ver con la nueva ley de pesca, para esto necesitan una persona que conozca del tema y su situación, a los actores del sector y también que sea de San Antonio Oeste y surgió el nombre de Iud.
El dos veces intendente de San Antonio, tendrá por delante varios desafíos: con la cartera que es preponderante en la economía local, lo personal y lo político. Si demuestra solvencia en esta función, estará nuevamente en competencia, algo que a muchos desvela.
Iud y Casadei fueron rivales acérrimos, hoy dialogan de forma cotidiana. Es la política.
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