San Antonio Oeste cumplió una semana sin casos sospechosos. Significa que aquellos que cumplimentaron la cuarentena desde sus inicios, con quienes se encontraron de manera estrecha, no arribaron a la zona con el COVID-19 a cuesta.
Si el virus se llegara a desatar en la zona, es porque ingresaría desde fuera de los límites marcados por la municipalidad.
“Lo que preocupa” a las autoridades, es que falle el filtro en la zona de los accesos, que no funcione y que, algún viajante, conductor o repartidor, que salió al interior rionegrino, específicamente a lugares de circulación viral, pueda traerlo al ejido sanantoniense.
Hoy no existe un protocolo legal para poner en cuarentena a las personas que vienen por ejemplo del valle, como ocurre cuando llegan desde Buenos Aires, Chaco o Córdoba, como del exterior. El gobierno rionegrino no hizo ninguna resolución al respecto.
La realidad que desde Salud mencionan extraoficialmente (no lo van hacer a viva voz), que no tienen el poder de someter en aislamiento a la gente que proviene de circular por la provincia, y si los sujetos voluntariamente, con las recomendaciones según protocolo lo hacen, bienvenido sea, pero quien «se rebele» no pueden obligarlo a quedarse.
Desde los controles en la ruta, envían al hospital local una lista de las personas que entran y solo mediante una comunicación corroboran, tras algunas preguntas, si tienen algún síntoma.
El titular del bloque de JSRN, Daniel López, manifestó esta semana, que se deben ajustar más la eficiencia en los controles, posteriormente apareció un audio que circuló por WhatsApp del delegado municipal de Las Grutas, Nicolás Carassale. El mismo no estaba completo, pero eso llevó a incongruentes especulaciones.
Los dichos del funcionario apuntaban a la abogada Ana Schiavonne quien tuvo estos días una diatriba con el delegado, por una comerciante que solicitaba permiso para salir a vender a la línea sur. Schiavone había iniciado el trámite para que su representada pueda acceder a la autorización.
Si bien el asesor letrado Gustavo Arbués terminó solucionando la prerrogativa legal para la repartidora, solo se trataba de eso, pero los audios, al no ser claros, tampoco al no entenderse el contexto en el que se hizo el mismo, terminan siendo una madeja de rumores en la sociedad. Varios interpretaron que se puede permitir a algunos salir, si tienen a alguien que los ayude desde el gobierno.
Pero no son los únicos audios, hubo otros donde también funcionarios y concejales hablaban de los controles y se cruzaban con comerciantes o choferes. Es lo que tienen que evitar.
Falta mucho para que termine esta emergencia sanitaria. La que es sumamente difícil saber cómo quedará San Antonio Oeste, la provincia y el país después de semanas de aislamiento y parálisis.
El gobierno municipal, muchos de sus ciudadanos, empresas y el sector del turismo sufrirán también las consecuencias del freno económico.
Esta semana abriría el municipio sus ventanillas de cobro, necesitan empezar a recaudar, Joaquín Landivar, secretario de hacienda, manifestó su preocupación para el pago de salarios del mes de mayo (que deben hacerlo en junio).
Justamente dependen de la coparticipación de impuestos federales, de las regalías y de la recaudación de tributos propios, todos recursos que indefectiblemente irán en ostensible caída en los próximos meses.
A esto se le suma el pedido de los comerciantes y de las Pymes que presionan por los impuestos y por otro lado, no pueden pagar a los empleados, como también los laburantes independientes que no tienen ingresos, por ende, los primero que dejarán de efectivizar son la tasas municipales.
Antes de finalizar la cuarentena, Casadei y Landivar van a tener que vislumbrar las estrategias financieras.
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