No sabemos quienes fueron los negociadores del municipio con el Diario Río Negro para que, por un escaso valor de 227 mil pesos, se le entregue tanta promoción y facilidades por parte de la municipalidad.
El contrato, casi un regalo de Navidad, no estipulaba siquiera donde iban ubicados los avisos. Solo menciona módulos de cinco columnas por tres o cinco centímetros hasta completar una página y media. Tampoco el texto mencionaba cuando y donde.
El negociador municipal, habría solicitado que aparezcan en el tabloide, en las páginas 3, 5 o 7 que son las más vistas de forma inmediata por el lector.
Asimismo el municipio le entregaba un espacio a la empresa gráfica, entre la quinta y cuarta bajada para colocar un carro de ventas, hasta pretenden expender agua mineral, también permisos para realizar promoción con juegos recreativos, en ese sector de la playa. Si esto fuera poco, cedían publicidad estática exclusiva en todas las fiestas populares, entre otros beneficios. En definitiva un hermoso regalo navideño, por un exiguo monto.
Al menos, por todo eso, la empresa gráfica, como para equiparar el canje publicitario, le hubiera cedido a la municipalidad, muchas más en páginas de expectativa o bien cederle varios suplementos exclusivos, ante tanto privilegios que le permitían.
Obviamente el Concejo deliberante iba a rechazar, principalmente desde la oposición, a quien contamos en ella a Luis Esquivel. Querían colocar sobre tablas el acuerdo con la empresa gráfica, pero chocaron con la negativa.
Esto es otra muestra que el ejecutivo debe entender: no tiene la mayoría en la legislatura comunal. La perdieron hace tiempo y si bien el presidente del cuerpo colegiado acompañó algunas iniciativas, hoy ya no la hace.
Por ejemplo el culebrón del voto al incremento del boleto urbano, donde terminó siendo un mamarracho por parte del oficialismo, porque resultó que los ediles del FPV firmaron los dictámenes, en forma favorable, en comisión y en labor parlamentaria. Unas horas después, en plena sesión, votan en contra. La presidenta del bloque peronista, Ayelén Spósito, señala que no acompañan la medida, pero luego del cuarto intermedio, tras recibir orden de la secretaria de coordinación Mónica Arburúa, mencionan que votaban a favor. Increíble y muy pocas veces visto en el país el procedimiento. Azorados la oposición y los presentes, no daban crédito a las contradicciones del bloque oficialista.
Resultó que el propietario de la Empresa Transporte Las Grutas se enteró de forma inmediata que rechazaban la medida y este llamó a Luis Ojeda, el intendente le dio la orden a su funcionaria que de votar a favor, y la situación se desmadró.
Posteriormente, primó la medida del pase a comisión nuevamente, para tener tratamiento de preferencia en la próxima sesión ordinaria, y el FPV votó dividido, Sánchez Pino dijo sí, mientras que los otros tres ediles dijeron que no. Que despiole.
¿Es confusión o falta de coordinación y liderazgo? Creemos que las dos últimas caben en esto. Reiteramos nuevamente, como lo mencionamos antes en esta columna: el oficialismo no tiene un eje de base consecuente con la realidad política que transitan.
Incluso después con la aprobación del contrato con la Casa de la Cultura del Bicentenaario y la concesión de la misma. Garriga Lacaze tenía el convenio desde octubre y recién casi en la última sesión lo ingresó al recinto. Cuando la oposición se quejó que lo hacían a último momento, acusaron a Marcela Dodero de la irregularidad. Pobre directora de cultura, casi la única dependencia política del gobierno municipal que funciona muy bien, se tuvo que llevar el mal trago sin tener la culpa.
Por otra parte, esa discusión trajo acusaciones cruzadas de supuestas violencia de género por el tono del Concejal Clemant hacia la edil Ayelén Spósito. Si bien el Concejo Deliberante es para debatir, no están para gritos y vulgaridades. Pero tampoco es un jardín de infantes. Nunca se escuchó epítetos insultantes.
El intendente municipal debe urgente buscar un operador político que trabaje con sus concejales, alguien que sepa manejar los tiempos justamente de la política. Esto no es un aprendizaje en el tiempo. Se terminan los plazos de espera y las críticas son cada vez más abundantes.
Carlos Aguilar @caa174