El Aeroclub San Antonio Oeste conmemoró el 5 de junio sus 77 años de vida, una fecha que encuentra a la institución «remontando» vuelo a pesar de los desafíos económicos.
En diálogo Elvira Sar, tesorera del Aeroclub, compartió los pormenores de la celebración y los esfuerzos que la comisión directiva realiza para mantener viva la pasión por la aviación en la comunidad.
Si bien la fecha exacta del aniversario (5 de Junio), fue un día laborable, se celebró con mensajes emotivos en las redes sociales, el festejo principal tuvo lugar este sábado.
La tesorera no ocultó las dificultades que atraviesan, una realidad compartida por muchas instituciones. «Se están pasando años difíciles, pero de a poquito, de a poquito se sigue remontando», afirmó. Sin embargo, el Aeroclub ha logrado importantes avances en los últimos dos años. Entre los logros más destacados, Sar mencionó la formación de un nuevo piloto y la adquisición de un surtidor de combustible propio, lo que agiliza las operaciones y reduce costos. Además, durante la última semana se refaccionaron los portones y se trabaja continuamente en el mejoramiento de las instalaciones.
La escuela de vuelo del Aeroclub continúa activa, con un alumno próximo a finalizar su curso y varias personas interesadas en iniciarse en el mundo de la aviación. Sar reconoció que la actividad es «bastante cara», y puso como ejemplo la reciente compra de unos «Orris» (juntas tóricas) para un avión, que costaron un millón de pesos. «Todo es costo dólar», enfatizó, resaltando la inversión constante que requiere el mantenimiento de las aeronaves.
Ante la consulta sobre cómo colaborar, Elvira Sar extendió una cordial invitación a la comunidad: «Todo el mundo es bienvenido». Aquellos interesados en asociarse o simplemente conocer la institución pueden acercarse al Aeroclub, contactarlos a través de sus redes sociales (Facebook e Instagram) o llamar por teléfono. Los fines de semana son los días más propicios para encontrar a los miembros de la comisión directiva, ya que la mayoría de ellos también tienen otras actividades laborales durante la semana.
Sar destacó que el Aeroclub es mucho más que un lugar para volar. Ofrecen paseos aéreos, vuelos de bautismo y en ocasiones colaboran en búsquedas o fotografías aéreas. Mantener estas actividades requiere un gran esfuerzo en el mantenimiento de aviones, la capacitación de pilotos y la gestión del combustible, cuya adquisición y transporte es compleja debido a los requisitos específicos.
La tesorera hizo hincapié en la importancia histórica y social del Aeroclub para San Antonio Oeste, señalándolo como un «emblema» y una institución «muy querida» que ha sabido prevalecer a lo largo de los años, a diferencia de otros aeroclubes que han desaparecido. «Es una institución importante en la ciudad, porque genera algo donde nacen los pilotos», afirmó con orgullo.
Concluyendo la entrevista, Elvira Sar compartió su agradecimiento y compromiso con la institución. «Yo hace pocos años que estoy ahí en el club y bueno, gracias a Dios, digo, como siempre digo, tuve muy buenos muy buenos integrantes ahí dentro de la institución, que me enseñaron muchas cosas», expresó. Su objetivo es mantener ese legado de fortaleza y cariño, transmitiendo el esfuerzo y la dedicación para que el Aeroclub siga «subiendo escalones» y «se siga volando».
Finalizando la conversación, Elvira Sar citó a Richard Bach: «Así como la gente común, la tierra es su hogar, para todos aquellos que estamos en el mundo aeronáutico, el cielo es nuestro hogar». Un sentimiento que resume la esencia del Aeroclub San Antonio Oeste en su 77º aniversario.
