El subsecretario de Comercio de la Municipalidad de San Antonio Oeste, Sebastián Senger, informó que en los últimos días se desarrollaron reuniones con carniceros de la ciudad y de Las Grutas, a raíz de las inquietudes que surgieron tras las inspecciones realizadas por organismos provinciales, en las que se detectaron irregularidades en el manejo de la cadena de frío.
Senger recordó que “hace dos meses atrás varias carnicerías fueron intervenidas por la provincia debido a problemas en el uso de freezers, cámaras y conservación de alimentos”, lo que derivó en decomisos y sanciones. Ante ese escenario, el área municipal se comprometió a fortalecer la capacitación y el acompañamiento para evitar nuevos inconvenientes.
“Anoche tuvimos una reunión muy buena con los carniceros, donde coincidimos en que debemos trabajar en conjunto. Yo me comprometí a gestionar con provincia un lineamiento claro de cómo trabajan ellos, para que nuestros comerciantes estén preparados y no se encuentren con sorpresas por desconocimiento”, explicó el funcionario.
Uno de los principales temas tratados con los comerciantes fue el uso del freezer. Según explicó Senger, “el mayor conflicto se da cuando la carne es congelada en las carnicerías, ya que no corresponde ese tratamiento. Una cosa es que en una casa se congele para consumo inmediato, pero en el comercio ese proceso puede dañar el producto y derivar en decomisos. El pollo, por ejemplo, sí se congela, pero la carne vacuna se trabaja en frío, no en supercongelado”.
El funcionario reconoció que muchas de las prácticas detectadas en las inspecciones responden al desconocimiento. “El freezer se convierte en una necesidad porque un carnicero no va a descongelar 20 kilos de carne si no los va a vender en el día. Justamente las capacitaciones buscan ordenar y alinear el sistema de trabajo, para evitar pérdidas económicas y sanciones”, apuntó.
El subsecretario confirmó además que ya se encuentran completos los cupos para los cursos de manipulación de alimentos que comenzarán la próxima semana. Senger destacó que la capacitación no solo está dirigida al rubro gastronómico, sino también a todos aquellos que manipulan productos cárnicos y otros alimentos. “Es un requisito obligatorio por cuestiones de seguridad alimentaria. Si uno no sabe cómo manipular lo que vende, se generan riesgos para el consumidor. Por eso insistimos en que todos deben realizarlo”, indicó.
Controles en los accesos
Respecto al control del ingreso de carne a la ciudad, Senger aclaró que la casilla de inspección funciona de lunes a viernes de 7 a 20 y los sábados de 7 a 13. “Aquellos transportes que traen precintos deben pasar por allí para abrirlos y volver a cerrarlos una vez que descargan. Si un camión es detectado en ruta sin el precinto, la mercadería puede ser decomisada”, subrayó.
Consultado sobre las dificultades para cubrir todos los turnos, el subsecretario reconoció que “se están cuidando los recursos y las horas extras”, aunque aseguró que en casos excepcionales, como camiones que arriban fuera de horario, “se envía un inspector para garantizar el procedimiento”.
