La víctima era un conocido vendedor ambulante en la zona, reconocido por su carro de comidas. El presunto autor del crimen ya está detenido, y las autoridades investigan las circunstancias.
Sierra Colorada, un pequeño y apacible pueblo de la Región Sur, amaneció el martes conmocionado por una tragedia. Miguel Alejandro Pérez, de 45 años, un conocido vendedor ambulante, fue asesinado en un hecho violento. La víctima era muy popular en la zona, famoso por su carrito de comidas en eventos comunitarios.
A las 2:04 de la madrugada, un vecino acudió a la Unidad Policial para alertar sobre un disturbio en la vía pública, específicamente en la calle San Luis. De inmediato, el personal policial se dirigió al lugar. Lo que encontraron no fue un simple altercado, sino una escena trágica: el cuerpo de Pérez yacía sin vida en la vereda.
“Cuando llegamos, ya no había nada que hacer. Lo encontramos tirado en la calle, y el médico del pueblo, tras revisarlo, dictaminó que se trataba de una muerte dudosa”, relató el Oficial Principal Mauricio Coñuel. Ante la gravedad del hallazgo, las autoridades no perdieron tiempo y convocaron al Gabinete de Criminalística de Los Menucos para trabajar en la escena del crimen. También se notificó de inmediato a la Fiscalía de General Roca.
Las primeras horas fueron caóticas. Testigos presenciales del ataque comenzaron a aportar detalles clave para esclarecer lo sucedido. Según las primeras versiones, Miguel Pérez no estaba solo aquella noche. Había pasado las horas previas con su agresor en su propia casa y, aunque los motivos aún no están del todo claros, se cree que ambos habrían tenido un conflicto semanas atrás. La tensión, sin embargo, volvió a estallar esa madrugada, y la discusión se trasladó a la calle.
El presunto responsable del asesinato, un joven de aproximadamente 24 años, intentó huir tras el ataque. Cuando la policía lo encontró, en un primer momento se resistió, pero finalmente decidió entregarse. “Al principio se mostró agresivo, pero logramos calmarlo y se entregó voluntariamente”, explicó Coñuel. También se secuestró un arma blanca, y aunque no se ha revelado oficialmente el tipo exacto, todo indica que se trataba de un cuchillo.
Mientras tanto, el cuerpo de Miguel Pérez fue trasladado a la ciudad de General Roca, donde el Cuerpo de Investigación Forense realizará la autopsia solicitada por el Ministerio Público Fiscal. Los resultados serán cruciales para determinar las circunstancias exactas de la muerte y aclarar los detalles que aún permanecen confusos.
Por la mañana, un equipo fiscal de General Roca se presentó en Sierra Colorada para asumir el caso. La investigación está en curso, y se espera que en las próximas horas se realice la audiencia de formulación de cargos contra el detenido, quien permanece bajo custodia policial.
Sierra Colorada, un pueblo donde las tragedias violentas son una rareza, sigue en estado de shock. Aunque el presunto autor ya fue detenido, las preguntas persisten: ¿qué motivó este violento ataque? ¿Podría haberse evitado? Las respuestas, por ahora, deberán esperar a medida que la investigación avance.