Se trata de una nueva oferta ecoturística en San Antonio Oeste con un proyecto que busca combinar la conservación ambiental con el turismo responsable en el Área Natural Protegida Bahía de San Antonio
Esta inciativa orivada, que podría operar desde el Parador Palo Kilométrico, ofrecerá actividades como paseos náuticos, avistaje de fauna marina, buceo recreativo y salidas fotográficas, siempre bajo estrictos protocolos para minimizar el impacto ambiental.
Las embarcaciones utilizadas cuentan con motores ecológicos de baja emisión, y los grupos son reducidos (máximo 10 personas) para garantizar la preservación del ecosistema.
El autor del proyecto destaca: «Nuestro objetivo es conectar a los visitantes con la biodiversidad del golfo San Matías, generando conciencia sobre su importancia. Queremos demostrar que el turismo y la conservación pueden coexistir».
El proyecto no solo promueve el turismo de observación de especies, sino que también busca dinamizar la economía local:
- Generación de empleo: Contratación de mano de obra calificada de la zona, como patrones náuticos, guías e instructores de buceo.
- Atractivo turístico: Posiciona a San Antonio Oeste como destino de turismo sustentable, incentivando estadías más largas.
- Educación ambiental: Charlas y muestras fotográficas para sensibilizar a turistas y comunidad.
Con una inversión inicial de $44 millones (ya cuenta con embarcaciones valuadas en $78 millones), el proyecto incluye mejoras en el parador, equipos de buceo y medidas de seguridad. Las actividades se desarrollan en coordenadas específicas del ANP, respetando zonas de uso restringido y evitando perturbaciones a la fauna.
Este proyecto operará bajo un marco normativo riguroso, que incluye leyes nacionales y provinciales como la Ley 2670 de creación del ANP Bahía de San Antonio y el Decreto 398/14 que aprueba su Plan de Manejo. Entre las medidas de mitigación destacan:
- Prohibición de acercarse a menos de 50 metros de la fauna marina.
- Restricción de interacción o alimentación de animales.
- Capacitación obligatoria para turistas antes de cada salida.
El autor del proyecto cuenta con habilitaciones de la Prefectura Naval Argentina, incluyendo patrón motorista profesional y buzo científico, además de certificaciones en seguridad náutica y primeros auxilios. Su embarcación principal, cumple con todas las normativas de transporte de pasajeros.
Este emprendimiento no solo revitaliza la economía local, sino que sienta un precedente en turismo responsable. «San Antonio tiene un potencial único. Queremos que el mundo lo conozca, pero sin dejar huella», concluye en la presentación.
