En una propuesta innovadora y cargada de aprendizaje mutuo, el CENS N°112 de San Antonio Oeste realizó una jornada educativa en el marco del Día del Respeto a la Diversidad Cultural, que contó con la presencia de jóvenes extranjeros que participan de un programa de intercambio del Rotary Club.
La actividad, organizada por las institución, comentó el profesor de Historia y Geografía Jorge Godoy que junto a docentes del turno noche, tuvo como objetivo promover el diálogo intercultural, el aprendizaje del idioma inglés y la reflexión sobre la diversidad social y cultural.
Durante la jornada, alumnos y docentes prepararon una dinámica de conversatorio donde los protagonistas fueron los jóvenes visitantes, provenientes de distintos países y con diferentes lenguas y costumbres. “La propuesta surgió desde un proyecto que venimos trabajando sobre identidad, género y diversidad. Queríamos hacer algo distinto para este día, salir del formato de acto tradicional e invitar a estos estudiantes de intercambio que cursan en instituciones privadas de la localidad y también uno del CET N°19”, explicó el profesor Godoy.
El encuentro se desarrolló en un ambiente de entusiasmo y curiosidad. Los alumnos del CENS tuvieron la oportunidad de formular preguntas, muchas de ellas en inglés, con el acompañamiento de los docentes de idioma que colaboraron como traductores. “Nos pareció una idea interesante aprovechar esta oportunidad para practicar el idioma y, al mismo tiempo, conocer otras realidades culturales. Dentro del programa de Historia y Geografía se trabaja el tema de las migraciones, así que esta experiencia fue muy enriquecedora”, señaló Godoy.
El profesor destacó además la responsabilidad y el compromiso de los estudiantes que participaron activamente del intercambio. “Fue notable ver cómo se animaron a comunicarse, incluso en otro idioma. Algunos prepararon las preguntas en inglés y otros se apoyaron en los profes para traducir, pero lo importante es que se animaron a hacerlo. No se trata solo del idioma, sino de aprender a comprender otras formas de vida y pensamiento”, afirmó.
La jornada continuó con una muestra artística de folklore argentino, donde se presentaron bailes tradicionales para que los visitantes pudieran conocer aspectos característicos de la cultura local. “Queríamos que también ellos se llevaran una imagen de nuestras costumbres, por eso la actividad terminó con una merienda de tortas fritas, que generó muchas risas y anécdotas entre los participantes”, contó Godoy.
El docente subrayó que uno de los aspectos más valiosos de la experiencia fue el diálogo intercultural espontáneo que se generó entre los jóvenes. “Fue interesante ver cómo se sorprendían con cosas cotidianas para nosotros, como la carne o las comidas tradicionales. Son detalles simples, pero que muestran las diferencias culturales entre un país del primer mundo y el nuestro. Esas charlas permiten valorar más lo propio y abrir la mente hacia otras realidades”, reflexionó.
