Uno de los paradores de Las Grutas, cerró un sector con cadenas de plásticos y soga, apoyados en postes de madera, la zona dónde habían delimitado el sector de alquiler de carpas. La municipalidad ordenó retirarlos.
El subsecretario de inspección de comercio Guillermo Martín y el funcionario a cargo de la delegación de Las Grutas, Anselmo Arenas, solicitaron al propietario del parador de la cuarta bajada que retirase lo colocado en la playa.
Esto surgió tras las quejas de residentes y turistas, momentos en que subía la marea y se agolpaban en la arena, no se les permitía pasar el lugar circunscrito. Asimismo, quienes expusieron la situación en las redes, evidenciaron su enojo por acordonar la playa pública.
En este contexto, Martín comentó a este medio digital que se hicieron presentes los inspectores municipales y que solicitaron se quiten los elementos, según dijo el propietario accedió hacerlo y que los postes lo quitarían posteriormente, cuando disminuya el flujo de gente.
Lo mismo sucedió con la quinta bajada, que utilizó un gran espacio para reservar un sector para dos noches de boliche al aire libre, lo cual generó una controversia. Mencionaron desde la municipalidad que hay habilitación para ello y que lo que no puede convertirse en boliche es dentro del parador mismo.
La controversia se inició, por estos eventos, los días anteriores, algunos dueños de locales bailables estipulan una competencia desleal.