Los capitanes de pesca refirmaron su exigencia para la eliminación del impuesto a las ganancias, “el que no puede distinguir entre un trabajo regular y el que realizamos los pescadores marítimos al motorizar una industria de alta producción e ingresos de divisas a las arcas del Estado Nacional, mediante un trabajo a destajo, sin horarios, sin feriados, con desarraigo familiar, y muy particularmente generador de trabajo para los compañeros de la estiba, procesadores y toda la cadena laboral, y también de altísimo riesgo”.
Destacan que “los pescadores, como todos, pagamos ya demasiados impuestos en la vida diaria. Tampoco el pescador sabe de ahorrar y menos en dólares, porque es el mismo sacrificio el que lo encamina a disfrutar de las cosas materiales de la vida, y lejos de ahorrar invierte fuertemente en la educación para sus hijos, en la construcción de casas o locales para generarse su propia jubilación ya que tampoco se le reconoce justicia económica al alcanzar su edad para el descanso, y por lo tanto no es necesario cobrarle un impuesto injusto”.
Agregan que “los pescadores no superamos los 10.000 trabajadores y si 10.000 trabajadores argentinos generamos crisis en la economía nacional, es más que preocupante. El impuesto nos entorpece gravemente al momento de discutir valores de productividad, provoca el negreo salarial y deja al trabajador a merced del vil antojo de algunos empresarios que por robarle al Estado le roban al trabajador”.
“Es más que evidente que habiendo pasado tantos años no se supo o no se quiso encontrar una alternativa que traiga solución a esta injusticia, pero aun así, una vez más pedimos al gobierno actual que mire a los pescadores como argentinos que ya hacen su aporte para que la Nación crezca, y le resaltamos que todos los días del año, y durante las 24 horas del día, también ejercemos la defensa de la soberanía en el Mar Argentino, defendiendo la patria diariamente y más aún si se nos convoca, como lo demostramos en la guerra por la defensa de las Islas Malvinas”, expresaron.