El presidente Javier Milei oficializó este lunes a través del Boletín Oficial el veto total a tres proyectos de ley de carácter social que habían sido sancionados por el Congreso: el aumento a las jubilaciones, la reinstauración de la moratoria previsional y la declaración de la emergencia en discapacidad.
La medida generó fuertes críticas por parte de dirigentes políticos y sindicales en Río Negro.
El vicegobernador de Río Negro, Pedro Pesatti, calificó la decisión como «un acto de profundo desprecio hacia el pueblo argentino». Aseguró que, al haber sido aprobadas por mayoría en el Congreso, «vetarlas es seguir ajustando a los débiles y beneficiando a los sectores más poderosos, a los que les baja impuestos».
Por su parte, el diputado de Unión por la Patria, Martín Soria, sostuvo que la referencia del Gobierno al superávit es una «excusa» y que «el ajuste de la motosierra es para pagar la timba de Caputo y Sturzenegger y seguir endeudándonos». Soria anticipó que el peronismo «votará para rechazar este atropello».
Desde el ámbito sindical, Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE, instó a los gobernadores a «mostrar empatía con los que están sufriendo» y a recordar que la política «existe para mejorar las condiciones de vida de la gente y no para deteriorarlas». En este sentido, aseguró que el rechazo a los vetos es «una oportunidad para comenzar a revertir la crisis de representación» y que los gobernadores fueron votados «para defender el federalismo y no ceder ante las extorsiones del Gobierno central».
La Asociación de Empleados Fiscales e Ingresos Públicos (AEFIP) también se manifestó al respecto, señalando que el veto «reabre el debate sobre la orientación de la política fiscal en la Argentina» y que afecta a «millones de personas que dependen del sistema previsional.»
