La Secretaria de Trabajo de Río Negro, María Marta Avilez, se refirió a la crisis que atraviesa la empresa ALPAT y su impacto en los trabajadores. Desde el organismo provincial, se trabaja para garantizar la estabilidad laboral y encontrar soluciones que permitan sostener la producción.
Avilez explicó que la Secretaría intervino en el conflicto a solicitud del gremio, dictando dos conciliaciones obligatorias para frenar medidas de fuerza y generar un ámbito de negociación. “Dentro del malestar generalizado, se logró la cancelación de los salarios adeudados, lo que trajo cierto alivio y permitió retomar el diálogo”, destacó la funcionaria en diálogo con FM Signos, de San Antonio Oeste.
Asimismo, subrayó la importancia de garantizar el pago íntegro de los salarios y preservar cada puesto de trabajo: “Nuestra prioridad es que se mantengan las fuentes de empleo y que la empresa pueda recuperar su actividad productiva”, afirmó.
Respecto a la posición empresarial, Avilez explicó que la compañía atribuye su crisis a factores macroeconómicos y a la competencia desleal provocada por la importación de productos a menor costo. “Ya lo vivimos en la década del 90, cuando la apertura indiscriminada de importaciones puso en jaque a la industria nacional. No podemos permitir que esto vuelva a afectar el empleo local”, enfatizó.
Además, los trabajadores han denunciado la falta de actualización salarial desde septiembre de 2024 y el deterioro de la planta, lo que representa un riesgo laboral. En este sentido, la Secretaría desplegó sus equipos técnicos para evaluar las condiciones de higiene y seguridad en la fábrica. “Estamos fiscalizando las instalaciones para garantizar que la salud y la seguridad de los trabajadores sean prioridad”, aseguró Avilez.
Actualmente, ALPAT opera con una guardia mínima mientras continúan las negociaciones. La Secretaría mantiene vigente la conciliación obligatoria y sigue gestionando acuerdos para que la empresa retome su producción con normalidad.