La artrosis es un importante problema de salud, siendo la rodilla la localización más frecuente: el 30% de las personas mayores de 65 años tienen artrosis de rodilla. Existen factores en su aparición que no son modificables, como la edad y la genética, pero existe un factor muy importante que si es modificable que es el sobrepeso. No es lo mismo para una rodilla soportar 65 kilos que 90, el desgaste del cartílago tiene que ser mayor en el segundo caso. El sobrepeso y la obesidad están directamente relacionados con el desarrollo de artrosis especialmente en las mujeres.
Múltiples estudios científicos reportan la asociación de obesidad con artrosis, pero no solamente en las rodillas, sino en todas las articulaciones del cuerpo. Los pacientes obesos tienen en su sangre niveles hormonales alterados que aceleran el desgaste del cartílago y promueven la inflamación.
¿Bajar de peso me va a quitar el dolor de las rodillas?
Si la artrosis ya está instalada no va a quitar el dolor completamente, pero definitivamente lo va a disminuir. Un estudio reciente de la universidad John Hopkins de Estados Unidos reporta que con sólo bajar 7 kilos disminuye el 50 % de los síntomas de la artrosis de rodilla.
¿Por qué es importante el ejercicio?
Por dos razones: primero porque usted va a bajar de peso porque gasta más calorías. Lo segundo es que el movimiento previene la destrucción del cartílago articular y mejora la nutrición del mismo. Sin embargo el ejercicio debe ser de bajo impacto: natación, bicicleta, o simplemente caminar. Bajar de peso contribuye a disminuir el dolor, lo que permite aumentar la actividad física y por ende disminuir aún más el peso corporal. La actividad física por su parte fortalece la musculatura y mejora tanto la flexibilidad como los rangos de movimiento lo que estabiliza la articulación y disminuye el progreso de la artrosis.
«Evitar el aumento de peso, casi sin importar el de partida, será clave para prevenir los problemas de rodilla».
Dr. Edgar Torres, traumatólogo, hospital A. Serra.