La pesca de langostinos en el Golfo San Matías avanza de manera cautelosa, según informó Mariano Saissac, representante de la Asociación de Productores Pesqueros de San Antonio Oeste.
En declaraciones en FM SIGNOS, detalló que las capturas actuales oscilan entre 15 y 20 cajones por embarcación, con algunos días excepcionales que alcanzan hasta 50. “Es una actividad sustentable por ahora. Esperamos que mejore con el tiempo”, comentó.
Sin embargo, el clima ha sido un obstáculo importante para los pescadores. “Este verano ha sido bastante ventoso, lo que dificulta la salida al mar”, señaló Saissac, quien también destacó que el precio del langostino depende directamente de la oferta y la demanda. “Rawson produce mucho, lo que nos juega en contra, pero cuando baja la cantidad allá, las condiciones mejoran para nosotros”.
En cuanto a la calidad del producto, Saissac destacó que el tamaño del langostino capturado en San Antonio Oeste cumple con los estándares del mercado, lo que representa una ventaja competitiva frente a otras regiones. Sin embargo, subrayó que sería ideal capturar ejemplares de mayor talla para acceder a mercados más rentables.
Saissac también abordó la dinámica interna del sector pesquero artesanal, que ahora cuenta con dos asociaciones en la región. Según su perspectiva, la diversidad de enfoques es beneficiosa. “Es bueno que existan diferentes posturas. El Estado provincial puede enriquecerse al escuchar propuestas variadas”, aseguró.
El dirigente enfatizó la importancia de revaluar el modelo laboral en el sector pesquero. En este sentido, destacó el sistema de cooperativas como una alternativa viable para garantizar el empleo y la sostenibilidad de las empresas. “Es un modelo que funciona. Da la posibilidad de que quien más trabaja, más gana, y genera estabilidad laboral”.
Los altos costos operativos son otro desafío significativo para los pescadores. Según Saissac, una embarcación consume entre 150 y 300 litros de combustible por jornada, lo que representa un gasto considerable, especialmente en días sin éxito. “Debemos capturar al menos 12 cajones para cubrir los costos diarios y poder seguir trabajando al día siguiente”, explicó.
Pese a estas dificultades, Saissac expresó su satisfacción con las mesas de diálogo abiertas entre las asociaciones y el gobierno provincial. “Estamos construyendo día a día. Lo importante es proteger los recursos sin quitarle a nadie el derecho a trabajar”.
A futuro, Saissac confía en que el sector pesquero artesanal podrá superar las adversidades y encontrar un equilibrio entre sostenibilidad y rentabilidad. “El diálogo y la unión son claves para avanzar. Cada postura cuenta y debe ser escuchada para construir una actividad mejor para todos”, concluyó.