Piden proteger la colonia de loros de Río Negro, la mayor del mundo

Loros Barranqueros, Quequen




 En el balneario El Cóndor de la provincia de Río Negro habita la colonia de Psittaciformes, es decir, del grupo de aves que integran loros, cotorras, catitas, guacamayos, papagayos y cacatúas, más grande del mundo. Allí hay 37 mil nidos y 74 mil ejemplares de loros barranqueros, a lo largo de 20 kilómetros, lo que representa el 71% de su población mundial.

Es una especie nativa que necesita protección y para ello, en marzo de 2023 se presentó el proyecto para la creación de la Reserva Natural Municipal “Acantilado De Los Loros”, que ahora tiene la posibilidad de tratarse en el Concejo Deliberante de Viedma.

El loro barranquero cumple un importante rol ecológico como bio-constructor o “creador de ambientes” para sí mismo y para otras especies. Recibe ese nombre porque excava sus nidos en barrancas de ríos y arroyos, o en acantilados frente al mar, como en el caso de El Cóndor. Durante cada temporada reproductiva los adultos alargan esas cuevas para criar a sus pichones y necesitan que el entorno mantenga sus condiciones. La alteración del hábitat natural donde se alimenta y anida impacta su estado de conservación.

Frente a este escenario, organizaciones de la sociedad civil y científicos relacionados con el estudio de la especie, acercaron una carta al Concejo Deliberante de Viedma para acercar su preocupación por la falta de tratamiento del proyecto de ordenanza para la creación del área protegida en el municipio.

En la misma, señalaron que la región se encuentra seriamente amenazada por las altas tasas de desmonte, así como por obras de infraestructura que se han llevado a cabo en el balneario y han destruido cientos de nidos, y generaron un fuerte proceso de erosión del acantilado que amenaza su estabilidad, afectando también la seguridad de los visitantes. También alertaron sobre el uso del área como basural, advirtiendo el riesgo de que las aves rapaces, que también nidifican en los acantilados, trasladen patógenos desde allí hacia la colonia de loros.

“Por su grave problema de conservación, el loro barranquero ha sido declarado como «especie vulnerable” en 2017 por el entonces Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación; sin embargo, la colonia de El Cóndor todavía no tiene protección legal”, señala Juan Masello, científico argentino dedicado a su estudio desde 1998 junto a su grupo de investigación.

El proyecto para resguardar la zona

A nivel internacional se ha clasificado esta colonia de loros y acantilados donde se emplaza como Área Importante para la Conservación de las Aves, destacando su carácter prioritario para la Patagonia. Complementariamente, la Administración de Parques Nacionales de Argentina y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria postularon a la colonia como Área Prioritaria para completar la representatividad biogeográfica del Sistema de Áreas Protegidas de la Patagonia Árida.

A nivel local, en 2019 entró en vigencia la Ordenanza Municipal Nº 8159 de Viedma, que destaca la zona como un área de singular valor ecológico y paisajístico, establece directrices urbanísticas para la creación de nuevas Áreas Naturales Protegidas y propone la aplicación de medidas precautorias. En 2023, la gestión del entonces intendente Pedro Pesatti creó un Centro de Valoración del Monte Nativo, “Senderos del Monte”, destinado a la educación y preservación de especies autóctonas y presentó el proyecto de creación de la Reserva Natural Municipal “Acantilado De Los Loros”.

La declaración de la Reserva garantizaría su protección y contemplaría los usos tradicionales de bajo impacto, incluido el turismo de playa y la pesca deportiva desde costa, creada con participación de las autoridades y de la comunidad, posicionando a la región costera rionegrina como polo de turismo de naturaleza.

La protección del área ayudaría a la conservación de su biodiversidad integral, incluyendo al jote cabeza colorada, al águila mora, al chimango, al halconcito colorado, al halcón peregrino, la lechuza de campanario, al carpintero campestre y la golondrina negra, especies que también habitan en este ecosistema.

La carta enviada al Concejo por el investigador Masello cuenta con el apoyo de WCS Argentina; Fundación Patagonia Natural; World Parrot Trust; Aves Argentinas; Fundación Soberanía, Río Negro; Fundación Humedales / Wetlands International; Fundación Inalafquen, Sociedad Naturalista Andino Patagónica; Estación de Rescate de Fauna Marina Guillermo «Indio» Fidalgo; el divulgador científico Lic. Alejandro Balbiano; y el Guardaparque Lic. Diego Ferrer.

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