El Superior Tribunal de Justicia (STJ) desestimó por mayoría un recurso de amparo informativo interpuesto por Carolina Leonardelli y Analía Martín desde Viedma que buscaba conocer detalles del convenio que firmó el gobierno nacional en China para construir la planta nuclear en Río Negro. Además las impulsoras de este amparo deberán pagar las costas de la presentación.
Leonardelli, quien es dirigente del ARI y una aspirante a ocupar la titularidad de la Defensoría del Pueblo municipal, señaló al diario Río Negro que “los rionegrinos no nos merecemos esto y nos tratan de tarados porque hasta el propio intendente (de Viedma, José Luis Foulkes) no cuenta con información”.
La decisión del STJ se tomó por mayoría con el voto de rechazo de los jueces Adriana Zaratiegui, Liliana Piccinini y Sergio Barotto. Se abstuvieron Enrique Mansilla y Ricardo Apcarián. La vocal Zaratiegui fundamentó su rechazo basándose en que el gobierno provincial informó que el acuerdo no fue recibido.
Sobre el tema, Leonardelli había explicado a APP que antes de la resolución del máximo tribunal judicial la Procuradora ya señaló que “nosotros no podemos acreditar la falta de respuesta; no sé lo que pretende”.
Respecto a por qué impulsaron este amparo informativo, relató que “ante el gobernador Alberto Weretilneck, la Secretaría Legal y Técnica y Secretaría de Ambiente pedimos en el marco de la ley 1829 de Información Pública tener acceso a los acuerdos que se hayan firmado tanto entre la provincia y Nación, como entre la Nación y la República China que involucre a Río Negro”.
Indicó que “hubo silencio ante esto, en la Secretaría Legal y Técnica no tienen ningún acuerdo, ni convenio firmado, por lo cual recurrimos a la justicia”.
“Tenemos derecho a la información sobre todo ante políticas de Estado que tienen que permanecer en el tiempo”, aseveró.
Explicó que con otros sectores no dicen no a la central nuclear sobre la costa atlántica por la oposición misma, sino por muchos motivos, primero porque se trata de una central sin antecedentes, no es que sea una planta ya conocida similar a Atucha I y II, segundo, porque hay muchos antecedentes de accidentes, y después que “no es una limosna”, es mucha plata y hay que devolverla.
Entre otros interrogantes que hay mencionó que no se dónde va a ir la energía generada por la central nuclear, previéndose que va a ir a las grandes urbes del país, no parea desarrollo provincial.
Consideró además a APP que la energía nuclear “es muy sucia”, con lo cual expresó que ni el gobierno nacional ni el provincial “pueden imponernos esto; nuestra vida tiene precio”.
Reconoció que tiene temor “a la radiación nuclear”, fundamentando que viajó a Europa y pudo acceder al impacto real de chicos sobrevivientes que se contaminaron en el accidente de Chernobyl. (APP)