Con la firma del ministro Banacloy de producción y agroindustria y del subsecretario de pesca Bridi, emitieron una resolución por la cual se deberá, según los parámetros establecidos en la normativa, proteger a cerca de poco más de treinta especies de cartilaginosos que habitan en el golfo San Matías.
El marco resolutivo, expresa que los mismos, al ser capturados por barcos pesqueros de arrastre, quedan atrapados en las redes.
Los investigadores del grupo CONDROS que trabajan en el CIMAS de San Antonio Oeste, advirtieron, tras un informe técnico, la gran vulnerabilidad de los peces cartilaginosos en en la explotación pesquera.
Esto surge del análisis realizado en las observaciones que se realizaron en el Golfo San Matías, además de relevar datos al desembarque de los buques pesqueros, aquellos que salen con permiso del gobierno provincial.
Según señala la resolución, el grupo de expertos mencionó la preocupación por el estado de las poblaciones de tiburones, rayas y gallos, los mismos son afectados por el sistema de pesca.
Esta resolución ministerial vuelve a prohibir la actividad industrial con los condrictios, sino también la pesca ilegal de costa, por lo cual es obligatorio si se capturan los ejemplares, retornarlos al mar, especialmente raya lenticulada, ojona, hocicuda, a lunares y chucho. El gatuso, pez ángel y el cazón, para no cortar la cadena reproductiva de los mismos. Esta devolución debe ser inmediata.
La normativa también advierte que si un barco al levantar la red encuentra una gran cantidad de peses cartilaginosos, deberá desplazarse a otro sector, asimismo, se prohíbe el uso de ganchos para la captura.