HISTORIAS SANANTONIENSES. Hace más de un siglo, San Antonio Este se erigía como un próspero asentamiento ganadero en el este del Territorio de Río Negro. Sin embargo, las necesidades operativas del puerto y los intereses comerciales generaron un debate sobre su reubicación.
Dos hombres, Adolfo Russo y Manuel Benito, se adentraron en el canal de la Caleta y descubrieron que los barcos podrían atracar en el interior de la bahía sin problemas una vez que se construyeran los muelles.
Así, el 10 de julio de 1905, la firma Sassemberg estableció el primer asentamiento en lo que sería el puerto de la caleta, posteriormente conocido como San Antonio Oeste, según un decreto del poder Ejecutivo Nacional emitido el 6 de enero de 1910.
La fundación del puerto marcó el inicio de un nuevo capítulo en la vida de los habitantes de San Antonio. Muchos pioneros respondieron al llamado del «Éxodo del Este» y se trasladaron al nuevo asentamiento en busca de una mejor calidad de vida y oportunidades laborales en la emergente zona portuaria.
En 1910, el ferrocarril trajo un cambio fundamental a San Antonio Oeste al proveer agua desde Valcheta. Durante sesenta y cinco años, esta fue la principal fuente de agua para la ciudad hasta que en 1975 se habilitó el canal Pomona-San Antonio.
La llegada del agua fue un hito trascendental, ya que los periodistas de diarios importantes como La Razón y La Prensa de Buenos Aires se sorprendían al ver que un pueblo sin agua era la cabecera de un ferrocarril independiente. Sin embargo, los habitantes de San Antonio Oeste se adaptaron a esta difícil situación, extrayendo agua de las profundidades de la tierra para su consumo, un método que ya habían empleado en su antiguo asentamiento.
La falta de agua era un desafío constante, pero los sanantonienses demostraron una resistencia inquebrantable. A pesar de las dificultades, se aferraron a su comunidad costera con visión de futuro y sed de progreso. Hombres y mujeres dedicados que deseaban ser fieles al lugar que habían elegido, un lugar que se encontraba junto al mar.
La historia de San Antonio Oeste es una prueba de la tenacidad y fortaleza de sus pioneros, quienes enfrentaron el desafío de poblar el litoral marítimo rionegrino en la costa norte de la Patagonia Argentina. A pesar de la adversidad, lograron forjar una comunidad resiliente que supo sobreponerse a la escasez de agua y construir un futuro próspero en armonía con el entorno marítimo. (Fuente: escritos de Adolfo Fragoza)