La PNA sostiene que prima facie no hay indicios ni elementos que permitan sostener que fue un incendio intencional. Se quemó la cubierta y puente de mando del pesquero Sumatra. Una hipótesis es que fue una falla eléctrica en una conexión que había del barco al muelle.
El Juzgado Federal de Viedma interviene por razones de jurisdicción en el siniestro de un buque pesquero acaecido en la mañana de este jueves en el espigón 2 del muelle Heleno Arcángel del puerto de San Antonio Oeste, en la provincia de Río Negro. Este viernes continuarán los peritajes iniciados en la víspera luego que se controlara el incendio y se enfriara el casco de la embarcación afectada y otra que estaba acoderada en segunda andana.
El jefe de la Prefectura Naval de San Antonio Oeste, Prefecto principal, César Insauralde, explicó al momento de comenzarse con la inspección del buque para hacer una evaluación de daños y determinar las causales del siniestro, que ‘prima facie’ no había elementos que abonaran la teoría de un acto intencional.
En cuanto a las circunstancias en que se inició el fuego, dijo que “en una recorrida que realiza el personal del puesto de la Prefectura detecta un principio de incendio que parecía era en el muelle, pero era entre el muelle y el barco Sumatra que estaba amarrado”, según le refirieron quienes primero divisaron las llamas.
“Se intentó apagar con extintores portátiles, los que no fueron suficientes, por lo que se da intervención al personal de bomberos de la localidad y de la estación SIPA de bomberos de Prefectura de San Antonio Oeste”, manifestó Insaurralde.
El Sumatra es un barco pesquero de altura de 33 metros de eslora. “Viene pescando desde hace bastante tiempo y operando en este puerto. El lunes había arribado y ya había descargado sus capturas”, detalló.
“Ahora estamos haciendo las pericias. Cuando por la tarde se enfrió todo el casco, se pudo ingresar y están trabajando los peritos. El fuego no llegó a camarotes, ni máquinas. Las llamas consumieron la zona de amarre, la timonera, el puente de navegación, y la cubierta”, describió el Jefe de la Prefectura SAO.
En tanto, sostuvo que “las grandes bocanadas de humo y fuego que se veían eran por lo combustible de los cajones de plástico y los cabos de amarre. El fuego empezó en cubierta, no en el interior del barco”, precisó al tiempo de indicar que “no hay riesgo de hundimiento del buque. Y una vez extinguido el fuego se achicó de la zona de máquinas el agua que se usó para apagar las llamas, y no hay ningún riesgo de flotabilidad del barco. Lo que se consumió fue lo que estaba en cubierta”, agregó.
El barco al momento de siniestro estaba ‘a seco’, “ahora hay marea alta y no tiene ningún inconveniente de flotabilidad. Acá en este puerto cuando baja la marea los barcos quedan en seco, y así estaba cuando ocurrió el incendio”, dijo Insaurralde.
Todos los barcos tienen una guardia mínima. Este tenía tres marineros a bordo. “Ellos no se dieron cuenta, porque el incendio se detectó desde afuera, y pudieron salir rápidamente ya que en el interior no había fuego”, detalló sobre las primeras manifestaciones recibidas por los tripulantes, quienes prestarán declaración para incorporar al expediente judicial.
El Prefecto sostuvo que “los primeros indicios es que se inició entre el muelle y el barco donde hay conexiones eléctricas que abastecen al barco. Una hipótesis es que se inició por un desperfecto eléctrico en las conexiones. No había trabajos realizándose en ese momento porque esto ocurrió a las 6:40 de la mañana”, manifestó.
“Prima facie podría tratarse de un cortocircuito. No podemos descartar otras hipótesis, pero no hay ningún indicio que pudiera ser intencional. No había personas extrañas en el muelle en ese sector”, dijo al desechar parcialmente la posibilidad de un atentado.
“No había nadie en el muelle y los que estaban, estaban a bordo. Corrió una versión de posible incendio intencional a partir de un conflicto que se generó estos días con un sector de la pesca acá en San Antonio Oeste, pero esas protestas siempre fueron en la localidad, y estos barcos no tienen que ver con eso; además, todas esas protestas siempre fueron pacíficas, sin violencia”, interpretó. “Fue una especulación, pero no hay ni un solo elemento que permita inferir o sospechar de un incendio intencional”, reiteró.
En segunda andana acoderado al Sumatra se encontraba el barco Columbus “que se le quemó un cabo de amarre y unos cables de iluminación; no son daños considerables en ese caso”, concluyó. (Fuente Revista Puerto)