Un hombre de San Antonio compró un gabinete plegable para máquinas de coser a través de una promoción en Facebook. Utilizó su tarjeta de crédito Naranja para realizar el pago en una única cuota.
Más tarde, se enteró de que el sitio www.fumingx.com era fraudulento y que las compras no eran entregadas. Presentó capturas de pantalla con comentarios negativos sobre la página como evidencia.
A pesar de su intento de denunciar la estafa a través del teléfono de atención al cliente de la tarjeta, no obtuvo respuesta por ser domingo. Finalmente, el lunes logró contactar a un operador, quien le informó que la compra se había realizado de manera legítima y no podía cancelarse.
Una vez recibido el resumen de la tarjeta, el cliente presentó una queja en la Oficina de Defensa del Consumidor de la Municipalidad de San Antonio Oeste. La oficina intentó establecer comunicación vía correo electrónico con la empresa fraudulenta, la cual respondió a los mensajes.
Además el cliente interpuso una demanda de menor cuantía en el Juzgado de Paz de San Antonio.
Oportunamente se presentaron los apoderados de la empresa Tarjeta Naranja, y “en el descargo efectuado por la empresa en sede administrativa, indica que de su sistema no se registran reclamos internos de desconocimiento de compra. y que el plazo para el desconocimiento del mismo es de 30 días, el cual no ha sido realizado conforme lo establece la ley de tarjetas de crédito”.
Sin embargo, el fallo destacó que las acciones del cliente, como las llamadas al servicio al cliente y la presentación de quejas en la oficina de defensa del consumidor, mostraban su intención de oponerse a la compra.
La jueza de paz resolvió que Tarjeta Naranja debe reembolsar al cliente la suma de $27.838,47 pesos, junto con los intereses correspondientes.