Un trabajador que se dedicaba a la pesca del langostino tuvo un accidente el año pasado que le produjo una incapacidad en la mano. Se le abonó una indemnización y al mes siguiente fue despedido. Sin embargo, inició una demanda por diferencias en el resarcimiento, y finalmente la aseguradora deberá pagarle 12 millones de pesos.
Comenzó a trabajar poco antes del verano de fines de 2020. En febrero del año pasado, mientras se encontraba lanzando la red, un cable de metal hizo un lazo y le produjo una torsión en el pulgar derecho. Afectó la articulación metacarpofalángica provocándole un agudo dolor en la zona de la mano y muñeca derecha y en el codo izquierdo.
Al mes siguiente fue despedido. En su demanda, explicó el tratamiento recibido hasta el alta médica otorgada y detalló los pagos recibidos. En su demanda aclaró que no está en desacuerdo con el dictamen de la Comisión Médica, sino con el pago de diferencias en las prestaciones dinerarias.
La Aseguradora Productores de Frutas Argentinas Cooperativa de Seguros Limitada no contestó la demanda. Se la declaró en rebeldía, “lo que autoriza a presumir la veracidad de los hechos pertinentes y lícitos afirmados por la parte actora y a tener por auténtica la documental acompañada”, dice el fallo
La Cámara Laboral de Viedma argumentó que el reclamo “se halla enmarcado dentro de las obligaciones legales que recaen en cabeza de las aseguradoras. Resulta irrelevante el eventual acuerdo al que puedan haber arribado empleador y aseguradora para el pago de las prestaciones correspondientes importando solo la circunstancia de que se haya abonado correctamente, o no, el importe que tenía derecho a percibir” el trabajador.
De esta manera, tras analizar lo adeudado y aplicar los intereses, hizo “lugar a la demanda en todas sus partes” y condenó a Productores de Frutas Argentinas Cooperativa de Seguros Limitada a abonar poco más de 12 millones de pesos.
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