El Concejo Deliberante de San Antonio Oeste comenzaría una ronda de debates para un texto unificado que reuniría y actualizaría las ordenanzas vigentes sobre zoonosis, incorporando nuevas disposiciones para el control de caninos, equinos y porcinos, con el objetivo de mejorar la salud pública, el bienestar animal y la seguridad urbana.
La medida, que derogaría las ordenanzas 4246, 5573 y 6633, establecería la creación del Sector de Servicio de Control de Zoonosis Municipal bajo la órbita de la Secretaría de Gobierno, con personal y asesoría veterinaria. Este área tendría funciones de prevención, control, campañas de vacunación y castración, recepción de denuncias por maltrato animal y fiscalización de criaderos, comercios y espectáculos con animales.
Entre los puntos centrales, la ordenanza regularía la tenencia de caninos, obligando al registro en el ReMCa, la identificación con chapa o tatuaje, y la circulación únicamente con collar, correa y bozal cuando correspondiera. Se prohibiría el ingreso de perros a playas y piscinas, así como dejar sus deyecciones en espacios públicos. Los animales que circularan sin control podrían ser capturados y alojados en la nueva Guardería Canina Municipal, con plazos para su recuperación por parte de los dueños y posibilidad de adopción en caso de abandono.
El plan también incluiría un Registro de Paseadores de Perros, campañas educativas, sanciones graduadas según la gravedad de las infracciones y la creación de un Registro de Infractores que impediría a reincidentes adoptar o tener animales.
En materia de porcinos, se crearía un registro de criadores y comercializadores, se establecerían requisitos sanitarios para prevenir la triquinelosis y se prohibiría la crianza en basurales o el uso de desperdicios sin tratamiento.
Una de las novedades sería la regulación integral de la tenencia y control sanitario de equinos, que obligaría a inscribirlos en un registro municipal, cumplir con microchip, libreta sanitaria, vacunaciones y test de anemia infecciosa. Los animales sueltos en la vía pública serían retenidos y, si no fueran reclamados en 15 días, podrían destinarse a instituciones, fuerzas montadas o adopciones.
La norma también contemplaría la posibilidad de convenios con veterinarios, ONG y entidades públicas o privadas, la asignación de fondos específicos a Zoonosis y campañas permanentes de concientización sobre tenencia responsable.
Con este nuevo marco, San Antonio Oeste buscaría armonizar la legislación, reforzar el control y promover una convivencia responsable entre la comunidad y los animales, respondiendo a problemáticas como la superpoblación canina, el maltrato, el abandono y los riesgos viales que generarían los animales sueltos.