Me dirijo a usted con motivo a las repercusiones que mis dichos, vertidos en vuestro programa, tuvieron en un conjunto de vecinos de Las Grutas, quienes en una nota de fecha 14 de Noviembre del corriente, cuestionan mis aseveraciones, a la vez que solicitan claridad en los conceptos invocados.
Al respecto, sucintamente manifiesto, que el foco lo he puesto sobre aquel deudor que debe cifras de gran valla para las arcas municipales ($80.000, $90.000), y no. claramente, en el pequeño contribuyente. Resulta a todas luces injusto que estos ciudadanos grutenses, con una deuda municipal cuantiosa, le endilguen falencias al estado, cuando ellos mismos deben contribuir a que el municipio sea eficaz en la prestación de servicios, mediante el pago de las tasas correspondientes. Respecto a aclarar que deudor debe y cual no. como manifesté más arriba no puse el foco en las juntas vecinales, sino en casos particulares. No obstante, existe el secreto fiscal en nuestro país, por lo que por la propia salvaguarda del contribuyente no se detallará, pero si se lo invita al mismo a acercarse a nuestras dependencias a los fines de regularizar su situación.
Por otro lado, el buen nombre y honor de las juntas vecinales en modo alguno lo he manchado, más bien, desde mi Asunción como Secretario de Hacienda, y aun desde antes de hacerlo, siendo un vecino más, siempre he coadyuvado a la integración de los tres centros urbanos, cuyas juntas vecinales de cada barrio, son artífices importantes y vitales del crecimiento de nuestra querida ciudad, encontrándome en la actualidad con auspiciosas reuniones con varias de ellas en pos de anunciar buenas noticias de cara al inicio de la temporada estival.
Sin más, y habiendo tratado de echar luz sobre el particular, saludo a Ud. y a los vecinos con sumo respeto. (Firmado Eduardo Young)
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