Con una gran convocatoria, el domingo se llevó a cabo la segunda edición del festival «Talento del Golfo» en el Salón de Usos Múltiples del barrio El Progreso, una jornada artística y comunitaria.
Dialogamos con Valma Astudillo, vecina impulsora de la iniciativa, junto a un grupo de colaboradores y con el apoyo de la Junta Vecinal del barrio.
El evento fue declarado de interés por la Legislatura de Río Negro, mediante una propuesta presentada por la legisladora Magdalena Odarda, lo que suma respaldo institucional a un proyecto cultural que busca seguir creciendo. “Talento del Golfo es la fiesta de los artistas, de descubrirlos, de darles la oportunidad de brillar”, expresó Astudillo con emoción.
Más de 55 participantes pasaron por el escenario, representando distintos géneros musicales —con fuerte presencia del folclore, aunque también se abrió espacio para otros estilos como cumbia, trap o cuarteto—, en un espacio que además de ser libre y gratuito, estuvo pensado para toda la familia.
Astudillo destacó que el evento no solo tuvo impacto cultural, sino también turístico y social: “Vino gente del Valle, algunos se alojaron en la zona, y prestadores como Walter y Natalia Pecot donaron estadías en Las Grutas para apoyar la movida. También se ofrecieron becas en música, lo que potencia aún más esta propuesta”.
Una de las particularidades del evento fue la incorporación de un equipo psicosocial y médico —liderado por la organización ABC y con la participación de la paramédica, además del acompañamiento de Belén Castro y otras cinco personas—, que brindaron contención a los artistas. “Un joven que trabaja en un taller se animó a cantar y se emocionó tanto que necesitó apoyo. Por eso pensamos también en el cuidado emocional”, explicó Valma.
La seguridad del evento estuvo a cargo de la empresa León, que destinó ocho personas para garantizar el desarrollo tranquilo de la jornada. En tanto, la Junta Vecinal del barrio, que colaboró con la organización, se encargó del bufet, generando así recursos para afrontar mejoras en el edificio. “Fue una idea pensada para que también sea un empuje para ellos”, señalaron.
A medida que pasaban las horas, el SUM se colmó de vecinos, familias y artistas, generando una atmósfera de entusiasmo y emoción. “La expectativa fue superada. Pensamos que iba a venir menos gente, pero no, llegó a desbordar el SUM”, relató Astudillo.
La jornada dejó una huella profunda en la comunidad y en quienes participaron. La repercusión en redes sociales y medios fue inmediata, con entrevistas desde Canal 10, medios digitales y propuestas para llevar el evento a otras localidades como Allen o Fernández Oro. La idea de la organización es recorrer la provincia con este festival itinerante, manteniendo su identidad: “Será Talento del Golfo en cada lugar que visitemos, sea en la montaña, el valle o la costa”, aseguró.
El mensaje final que dejó Astudillo fue claro y esperanzador: “No hace falta tener mucho dinero para hacer grandes cosas. Hace falta tener sueños, metas, y ponerle trabajo. Ayer nos dimos cuenta de que hacen falta estos espacios culturales, que valoren al artista local y regional”.
“Talento del Golfo” se consolida así como un festival cultural que une a la comunidad, promueve la cultura y genera oportunidades para artistas emergentes, con una impronta genuina, inclusiva y profundamente comprometida con lo social.