Hace pocos días intendentes de todo el país solicitaron que la próxima reforma tributaria incluya una reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 21% al 10,5% para todas las compras y contrataciones que realizan los municipios.
La propuesta, impulsada por la Federación Argentina de Municipios (FAM) y el Consejo Federal de Intendentes (COFEIN), busca aliviar el costo de funcionamiento de las administraciones locales y generar un “efecto cascada” que permita disminuir tasas municipales y mejorar la prestación de servicios en cada territorio.
El reclamo fue formalizado a través de un documento conjunto dirigido a diputados nacionales, en el que decenas de jefes comunales pidieron que la reducción del IVA sea incorporada de manera expresa al proyecto de reforma tributaria que el Gobierno nacional prevé enviar al Congreso en las próximas semanas. Según plantearon, la actual estructura impositiva genera una fuerte asimetría entre los municipios y el sector privado, ya que estos últimos pueden descontar el IVA como crédito fiscal, mientras que las comunas no cuentan con ningún mecanismo para recuperar ese tributo.
“La situación se volvió insostenible”, advirtieron los intendentes de la FAM y del COFEIN en el texto elevado al Congreso. En ese sentido, remarcaron que los gobiernos locales deben afrontar demandas crecientes en áreas clave como la asistencia social, la obra pública, la salud, la seguridad y los servicios básicos, pero con menos transferencias nacionales y presupuestos cada vez más ajustados.
Desde el ámbito local, el concejal Fabrio Mirano, quien impulsa la iniciativa mediante un proyecto de comunicación al Poder Legislativo nacional, explicó el impacto concreto que tiene el IVA en las cuentas municipales. “El municipio paga IVA sobre todo lo que compra, pero no puede descontarlo de nada. Eso genera una desigualdad muy fuerte frente al sector privado y un costo operativo que termina impactando en los recursos públicos”, señaló.
Mirano sostuvo que permitir que una parte de esos recursos quede en manos de los gobiernos locales “podría cambiar rápidamente la ecuación fiscal con la que hoy deben enfrentar obras, servicios y demandas urgentes”. Según explicó, la reducción del IVA no solo aliviaría el gasto corriente, sino que también brindaría mayor previsibilidad financiera para planificar inversiones y políticas públicas a mediano plazo.
En el documento firmado por los intendentes se detalla que la medida permitiría “modificar una situación distorsiva que agrava la asimetría entre municipios y sector privado, afectando el desarrollo económico de las comunidades”. En ese marco, remarcaron que cada peso que hoy se destina al pago de IVA es un recurso que deja de invertirse en infraestructura, mantenimiento urbano, equipamiento, programas sociales o mejoras en la calidad de los servicios.
Los jefes comunales también argumentaron que la baja del IVA podría tener un impacto positivo indirecto sobre los vecinos. Al reducirse los costos de funcionamiento municipal, las comunas contarían con mayor margen para reducir o contener el aumento de tasas municipales, o bien para ampliar y mejorar prestaciones esenciales como el alumbrado público, la recolección de residuos, el mantenimiento de calles y caminos, y la asistencia social.
El reclamo por la reducción del IVA se suma a una serie de demandas que los municipios vienen planteando en los últimos meses, en un contexto de fuerte restricción fiscal y caída de ingresos. Entre los pedidos pendientes, los intendentes también insisten en la redistribución del impuesto a los combustibles, al considerar que se trata de un tributo clave para financiar obras de infraestructura vial y el mantenimiento de caminos urbanos y rurales.
Desde la FAM y el COFEIN remarcaron que los municipios son la primera ventanilla del Estado frente a las necesidades de la población y que, en muchos casos, deben asumir responsabilidades que exceden sus competencias formales, especialmente en situaciones de crisis social y económica. “Cuando los recursos no alcanzan, son los gobiernos locales los que igualmente deben dar respuestas”, indicaron.
En ese contexto, los intendentes esperan que el Congreso tenga en cuenta el planteo y que la reforma tributaria contemple una mirada federal, que reconozca el rol estratégico de los municipios en el desarrollo económico y social del país. Mientras tanto, anticiparon que continuarán impulsando el debate y sumando adhesiones para lograr que la reducción del IVA sea tratada como una herramienta concreta para fortalecer las finanzas locales y mejorar la calidad de vida en cada comunidad.
