Mientras persiste la polémica en torno a los montículos de tierra provenientes de la zona de la remediación ambiental y que fuera depositados en San Antonio Oeste, autoridades municipales, representantes vecinales y técnicos especializados continúan trabajando para determinar su composición. Los estudios preliminares realizados hasta ahora indican que el material no presenta niveles de contaminación que superen los parámetros establecidos por la legislación nacional.
Daniel López, intendente interino del municipio, señaló que «hasta ahora los resultados son prácticamente normales para una tierra común y corriente». A pesar de esta tranquilidad inicial, el funcionario recordó que el municipio no puede actuar hasta que el juez de amparo que interviene en la causa se expida: “No podemos mover los montículos porque el amparo lo impide. Estamos a la espera de la resolución judicial”, explicó.
En este contexto, López expresó su deseo de que se pueda realizar una reunión directa con el juez a fin de agilizar el proceso: “Sería bárbaro poder hablar directamente y no a través de escritos que subimos a la página de Justicia. Todo se vuelve muy burocrático”. Asimismo, reconoció la preocupación de la comunidad: “La gente quiere que saquemos los montículos, se ha generado mucho miedo, pero los análisis indican que no hay un riesgo mayor que el de cualquier otra tierra de la zona”.
Estudios en curso y expectativas
Durante estos días, un equipo técnico de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), proveniente de Córdoba, se encuentra realizando mediciones in situ con tecnología de fluorescencia de rayos X (XRF). Este dispositivo permite detectar la presencia de metales pesados en el suelo de manera inmediata. Además, se tomaron muestras físicas que serán analizadas en laboratorio mediante técnicas más precisas, como la espectrometría de plasma (ICP).
Rocío Fernández, subsecretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable del municipio informó que también se han enviado muestras a un laboratorio en Buenos Aires, tras un muestreo realizado en presencia del defensor del pueblo. Se espera que los resultados estén disponibles en los próximos días y formarán parte del informe que se entregará al juez de amparo. “Hoy tuvimos un adelanto y los resultados indican mínimas concentraciones de metales, lo que nos deja más tranquilos. Pero hay que esperar los análisis completos”, explicó.
Una decisión en manos de la Justicia
Por su parte, la concejal Jovita González, del partido Compromiso Ciudadano, destacó que todo este procedimiento fue impulsado a raíz de una mesa ampliada con participación de distintos actores locales. Aclaró que “la decisión final sobre qué hacer con el material la tomará el juez de amparo, en función de los informes que se le presenten”.
González también expresó su preocupación por el incumplimiento de disposiciones judiciales previas: “Hubo una orden de no tocar los montículos y se tocó. Esta situación está generando costos extras y alguien tiene que hacerse responsable”. La concejal anticipó que podría haber consecuencias legales y económicas para los responsables de haber desobedecido lo establecido. En paralelo, se confirmó que ya existe una causa penal iniciada de oficio en fiscalpia de Viedma.
Expectativas y próximos pasos
Los trabajos de campo continúan condicionados por las condiciones climáticas. De no mediar lluvias, los técnicos estiman poder concluir las mediciones en las próximas horas. Según anticipó López, los especialistas permanecerán en la ciudad al menos hasta el viernes.
Una vez concluidos los análisis de laboratorio, se elaborará un informe técnico que será elevado a la Justicia. Solo entonces se definirá si los montículos deben ser retirados o si pueden ser redistribuidos sin riesgo.