Ocurrió el sábado por la tarde, en Punta Perdices, en San Antonio Este. Se habían instalado en un banco de arena y la pleamar los arrinconó y los rodeó.
La familia compuesta por tres mayores y dos menores se encontraban en una camioneta y un cuatriciclo desde la mañana cuando la marea estaba lejana.
Al verse rodeados por el mar se comunicaron por telefóno a la policía y estos derivaron el auxilio a la fuerza nacional que llegaron al lugar tras atravesar médanos según confirmaron a este medio.
Si bien podían salir por un camino directo, el pánico de verse cercados por las aguas no pudieron entrar en entendimiento y los nervios impidieron que solos no podrían salir del lugar.
Lo importante es que se hayan comunicado y Prefectura actuó de manera inmediata, la marea cubre ese sector norte de las playas portuarias cuando se produce la pleamar.