La campaña invita a adoptar una ballena para contribuir con las acciones que el Instituto de Conservación de Ballenas realiza para mitigar las amenazas que enfrentan las ballenas, basándose en el conocimiento científico.
Las ballenas son indicadoras de la salud de los océanos y nos muestran que su hogar está lleno de obstáculos y sufre la degradación como consecuencia de las actividades humanas.
El mensaje principal de la campaña expone las amenazas que enfrentan las ballenas en los océanos y que atentan contra su supervivencia.
Durante el primer año de vida la cría o ballenato tiene una estrecha relación con su madre, a quien sigue en cada movimiento, con ella duerme y juega en el mar, de ella toma la leche que lo hará crecer varios metros y aumentar miles de kilos.
Un año después, el ballenato se desteta de su madre y comienza su vida como ballena juvenil independiente. Al recorrer los océanos, estas ballenas inician su lucha por sobrevivir enfrentando múltiples amenazas que atentan contra su vida y su hábitat.
Comunicarse entre ellas implica gritar, ya que el ruido de los motores de embarcaciones, máquinas, estudios sísmicos, sonares y explosiones submarinas les dificulta escucharse. El ruido las desplaza de sus hábitats, genera alteraciones de comportamiento y daños en la audición y en los órganos. En situaciones extremas, produce varamientos y la muerte.
Encontrar alimento es cada vez más difícil, no solo como consecuencia de la sobrepesca industrial sino también por el calentamiento global que reduce las poblaciones de peces y de kril.
Recorrer los océanos se ha transformado en una carrera de obstáculos para las ballenas: las redes de pesca y sogas las lastiman y ahogan; son colisionadas por embarcaciones; la basura marina, en particular los plásticos y los químicos, las intoxican.
Muchas poblaciones de ballenas son sobrevivientes de la cacería comercial. La moratoria establecida por la Comisión Ballenera Internacional permitió la lenta recuperación de algunas especies. Sin embargo, muchas poblaciones se encuentran aún muy por debajo de los tamaños originales y los océanos ya no son un lugar seguro para ellas.
Lo que afecta a las ballenas, afecta también a la humanidad. Es responsabilidad nuestra revertir esta situación, para que ellas puedan vivir y no sobrevivir.
¿Cómo sumarse a esta campaña?
Al adoptar una ballena cada persona contribuye con fondos que permiten continuar generando el conocimiento científico esencial para monitorear las poblaciones de ballenas, identificar amenazas y promover soluciones para mitigarlas, entre ellas la creación de nuevas áreas marinas protegidas y santuarios marinos.
¿Por qué Adoptar una Ballena?
En 1970 el Dr. Roger Payne, presidente de Ocean Alliance, descubrió que era posible identificar individualmente a las ballenas francas australes a partir del patrón de callosidades que tienen en su cabeza. Esto dio inicio al Programa de Investigación Ballena Franca Austral que el ICBcontinúa en Península Valdés y que tiene como pilar la foto identificación. Actualmente se conocen 3.500 ballenas individuales, y sus historias de vida dan sustento al Programa Adoptá Una Ballena.
Aoni, Serena, Valentina, Nube, Manantial, Luminosa, Mochita, Hueso, Docksider y Troff son algunas de las ballenas que podemos adoptar simbólicamente. Cada una fue seleccionada por reflejar aspectos representativos de la población de ballenas francas, con diferentes características, comportamientos, grupos familiares y porque han enfrentado diversas problemáticas ambientales y amenazas de conservación.
Cada persona que adopta una ballena recibe un certificado de adopción con su nombre y la foto de la ballena elegida, su registro de observaciones y una cartilla educativa. Dependiendo del monto de la donación, recibe también un modelo de la ballena franca para armar de la Colección Cetáceos de «Guardabosques”. Cada año, y en agradecimiento por la continuidad de la donación, todos los “adoptantes” reciben un obsequio que a partir de 2019 serán diferentes especies de cetáceos que habitan el Mar Argentino, diseñadas especialmente por Guardabosques para el ICB.
Sumate a esta campaña y ayudanos a lograr que los océanos sean un hogar seguro para las ballenas, donde todas las especies marinas puedan vivir y no sobrevivir.
© Instituto de Conservación de Ballenas. GACETILLA DE PRENSA – EL INSTITUTO DE CONSERVACIÓN DE BALLENAS LANZA LA CAMPAÑA ASÍ CRECEN, ASÍ SOBREVIVEN. Se puede reproducir citando la fuente.