El Fiscal general de la Provincia de Río Negro, Fabricio Brogna, presentó un Recurso Extraordinario Federal, para que se remita conjuntamente con las actuaciones a la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Esto se inició es tras el último fallo del mes de febrero.
Ezequiel Castro, abogado de la familia, confirmó a InformativoHoy que se apeló la modalidad de la pena en suspenso “por esto se realizó un pedido extraordinario federal, que estamos esperando que sea admitido o no por el Superior Tribunal de Justicia de Río Negro” e indicó que obviamente adhirieron a la medida.
Por su parte, Patricia Campos, la madre de Nico Gutierre, manifestó también a este medio “lo solicitamos después del fallo, queremos que se revea, vamos a ir hasta las últimas consecuencias, se lo debo a mi hijo” comentó.
El fiscal Brogna señala en el escrito “el agravio de esta Fiscalía General se materializa en la causal de arbitrariedad por fundamentación aparente, apartándose del debido proceso legal, lo que en el caso constituye una violación al derecho a la protección judicial y a las garantías judiciales. Se observa que la sentencia recurrida se sienta en la sola voluntad de los Jueces resultando evidentes los vicios de razonamiento en su intento de fundamentación”.
Agrega “Se deja sin efecto una sentencia del Tribunal de Impugnación, que para llegar al monto y a la modalidad de cumplimiento de pena, analizó la sentencia del tribunal de juicio y entendió que era indiscutible el grado de responsabilidad de Barilá – presidente del club- quien debía garantizar la seguridad de las instalaciones, las que claramente eran precarias. El mismo análisis realizó para Sandoval, quien –como encargado del predio- había sido advertido con anterioridad de lo que sucedía en la cancha en relación a vulnerabilidad del sistema eléctrico”.
También expresa “es que, existe el deber de compatibilizar los derechos de la víctima con los del imputado, sin embargo, la sentencia en crisis, dejó sin efecto un fallo que tuvo en cuenta el grave daño causado, y el alto grado de responsabilidad de los imputados frente al hecho, sobre todo, conociendo el estado de las instalaciones eléctricas de la cancha de fútbol que fue catalogada por la sentencia como “una trampa mortal”.