Por primera vez, en la localidad de San Antonio Oeste, se desactivan municiones de grueso calibre.
Las mismas pertenecían a las vidrieras de exhibición del museo municipal que se incendió, las fuerzas de seguridad debieron desechar las mismas con dispositivos especiales, debido a que una caja de municiones. estalló en medio del siniestro.
La Brigada de Explosivos de Viedma se hizo presente por la tarde de ayer, para articular con bomberos el protocolo que tienen para la desactivación de las mismas.
Los riesgos fueron por la exposición a las altas temperaturas y constatar que eran municiones activas e inestables.
El personal de bomberos se encuentra por lo general coordinando este tipo de tareas, con la brigada de explosivos, en las diferentes acciones utilizando el protocolo establecido para tal fin, son quienes indican la metodología, despliegue y tácticas a seguir, según cada caso en particular.