En medio de crecientes preocupaciones sobre la seguridad sanitaria en San Antonio Oeste, Ada Nahuelhual, responsable de zoonosis en la municipalidad, revela que los análisis enviados a Buenos Aires enfrentan demoras significativas, lo que pone en peligro la respuesta rápida ante situaciones de riesgo como el reciente hallazgo de un murciélago infectado con rabia.
«Nuestro sistema ha experimentado cambios desde la asunción del nuevo gobierno, lo que ha impactado en la velocidad de los procedimientos», afirma Nahuelhual. «Los análisis, que solían tardar semanas, ahora pueden demorar meses, lo cual es preocupante en casos como este.» señaló en SIGNOS FM.
El descubrimiento de un murciélago muerto en la zona del loteo del lago, siendo objeto de juego por un perro, ha desencadenado una respuesta urgente. Tras realizar los análisis correspondientes, se confirmó la presencia del bacilo de la rabia en el murciélago. El animal estuvo aislado y puesto en observación, mientras se prepara un operativo para vacunar a los perros en el área afectada.
«Nuestra prioridad es proteger a la población canina y humana de posibles brotes de rabia», enfatiza Nahuelhual. «Estamos coordinando un operativo que incluirá puntos fijos de vacunación y posiblemente visitas casa por casa en los próximos días.»
Sin embargo, la preocupación se extiende más allá de este muestreo. Nahuelhual también señala las dificultades en la detección de triquinosis, destacando un caso reciente donde, de 98 cerdos analizados, uno dio positivo. «Los resultados tardaron cinco meses en llegar, lo que evidencia una demora preocupante en nuestro sistema de salud pública», comenta.
Ante la incertidumbre sobre la posibilidad de realizar nuevos muestreos antes de fin de año, Nahuelhual subraya la necesidad de adaptarse a los protocolos gubernamentales vigentes, aunque reconoce las limitaciones impuestas por la falta de recursos y los cambios en el Instituto Malbrán.
«Actualmente, el análisis de triquinosis se realiza con muestras de animales sacrificados y no con sangre», aclara Nahuelhual. «Contamos con el servicio en el Hospital A, como también un veterinario local capacitado para llevar a cabo estos estudios, pero es fundamental mejorar los tiempos de respuesta y garantizar la seguridad de nuestra comunidad.»