La asunción de Casadei en Las Grutas es un símbolo de los tiempos de JSRN. La villa balnearia es uno de los epicentros del turismo en Río Negro y este nuevo gobierno municipal entiende que “la industria sin humo” es el porvenir inmediato.
Comprenden desde el partido provincial que revalorizar estos lugares, son potencialmente esenciales para atraer inversiones y el mejoramiento de estos sitios es fundamental para obtener réditos en todo aspecto.
La potencialidad de Las Grutas es ilimitada, la supieron ver los fundadores hace 60 años, no lo hicieron de manera improvisada. Sabían, que su crecimiento, una vez iniciado, no tenía parangón.
Después llegaron quienes la tomaron en cuenta y quienes dejaron pasar la posibilidad. Su crecimiento es inexorable y hoy cuenta con un movimiento en temporada estival, el más continuo de la Patagonia.
Entender al ejido sanantoniense como municipio turístico es sumar futuro.
En el discurso de toma de posesión, Casadei fustigó a sus predecesores del gobierno municipal, no solo en ello, sino además en la primera ordenanza firmada, su texto expresa cómo encontrarían las localidades, especificando a Las Grutas en un “estado de abandono”.
No hubo quejas, ni de los concejales del Frente de Todos, ni de quienes se retiraban del gobierno. Algunas expresiones por lo bajo, solo eso. Varios del Frente de Todos, pasados los días, dieron cuenta que “la vara” de Ojeda no fue tan alta.
Tampoco fue “alta la vara” del Concejo Deliberante donde la presidenta en ejercicio, se quejó por el no traspaso como debe corresponder a instituciones representativas. Recibió una lastimosa respuesta misógina del saliente titular de ese cuerpo colegiado por las redes sociales.
En menos de cuatro días el actual ejecutivo actuó en todo aspecto. Además, dando respuesta a quejas y solicitudes de varios años a los vecinos.
Era una obviedad que quienes están en la vereda de enfrente, de la nueva intendencia, iban a expresar “escoba nueva barre bien”, enunciado para aquellos con visión corta y análisis laxo.
Es por esto último que el peronismo se debe una gran autocrítica interna. Deben comenzar abrir la Unidad Básica a los jóvenes y las ideas renovadas, del fracaso hará crecer una fuerza nueva.
Pero, el primer parte de prensa del justicialismo, tras el traspaso de mando, fue denunciar persecuciones a afiliados y simpatizantes de la última campaña. No especificaron a quienes. Serían empleados que se quejan porque los cambian de puesto, de la tranquilidad del escritorio, lo envían a la calle.
Cuando los argumentos para rebatir son pocos, la denuncia es un factor permitido para “hacer ruido”. El elemento que no falla.