El Flamenco Rosado ¿el ave más vistosa de nuestras costas?

El flamenco austral (Phoenicopterus chilensis), es una especie de amplia distribución en Argentina, presente en todas las provincias hasta Tierra del Fuego y ocasionalmente en las islas Malvinas. En nuestra Área Natural Protegida Bahía San Antonio, la estrella más vistosa de esta época del año, por sus colores y la numerosa bandada que se puede apreciar.

Se encuentra caracterizada como especie Vulnerable para la Argentina. Pero, ¿Porque los flamencos son de un color rosa espléndido? Su color rosáceo es una señal de buena alimentación, de salud y seducción. Por su alimentación, de suma importancia, son de un color rosáceo, más o menos fuerte, desde el rosa pálido hasta el color salmón, dependiendo de la especie y del lugar donde se encuentre, la intensidad dependerá de la cantidad de carotenoides presente en su dieta diaria. Y poco a poco se acumulan en las plumas a medida que estas crecen. El dato curioso, durante su desarrollo, ya empieza a recibir pigmentos, hasta el punto que la yema se vuelve de color rojo vivo. Sin embargo, cuando eclosiona, el polluelo es gris, el adquirir el inconfundible plumaje es cuestión de tiempo.

La bióloga y científica de San Antonio Oeste; Patricia González, sobre esta especie indicó “Veo a los flamencos durante mis salidas de estudio de otras aves desde hace 30 años y los números han aumentado en los últimos años. A modo de ejemplo en la Mar Grande era habitual ver alrededor de 300 flamencos, pero más recientemente hasta 1000 y 1500 en diferentes grupos. Por ahora, participó colaborando de los censos simultáneos del grupo de Conservación de Flamencos Altoandinos, que han incluido a nuestra especie para su monitoreo. No se conoce mucho de la especie, pero luego del primer taller virtual realizado el 14 de mayo de este año, donde participaron investigadores de diferentes sitios, nos dimos cuenta que este aumento parece relacionado con la falta de agua en muchas lagunas interiores. O sea, que nuestras costas parecen estar actuando como un refugio. Ellos pasan la mayor parte del año en el ANP Bahía de San Antonio, pero sus números disminuyen notablemente durante la temporada reproductiva en la primavera y principios del verano. No sabemos dónde nidifican, pero sabemos de algunas colonias cercanas que muchas veces han cambiado de lugar en épocas de sequía o ante la presencia de intrusos y perros. Solo ponen 1 huevo por año al cual le dedican todo su cuidado”.

“Sobre su alimentación, con su característico ritmo de baile filtran plancton, algas, crustáceos utilizando su pico y lengua. Su postura típica es cabeza abajo, o sea que el pico queda al revés, a modo de pala, mientras con las patas suelen «zapatear» removiendo el sedimento para movilizar su alimento”.

“A la gente le encantan los flamencos, pero ellos son muy sensibles a la presencia humana.  Estamos observando que en fines de semana concurridos no tienen lugar dónde bajar durante las pleamares y se ven obligados a volar continuamente porque la gente ocupa sus sitios de descanso o los molesta con perros que los corren o vehículos en la playa. La gente admira la elegancia de sus colores que adorna el azul del Golfo, si queremos apreciarlos y aprovecharlos como el gran atractivo turístico que son, debemos cuidarlos y proteger sus sitios, sobre todo de descanso, durante las mareas altas para que ellos puedan estar tranquilos y para que la gente pueda admirarlos”.

• Fotos: Sengsavane Chounramany – Fotografa/Ilustradora –
• Video compartido por la Fundación Inalafquen:

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